Introducción
La actividad del turismo se lleva a cabo en un territorio con características sociales y culturales, y que, en una conjugación de estos elementos, se pueden establecer rutas turísticas que promuevan el desarrollo regional y local, integrando una creación de redes empresariales para el mejoramiento de las condiciones de vida del territorio.
Por supuesto que la ruta debe enmarcarse con los Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS), por el compromiso mediante el Pacto Nacional en el 2016, donde Costa Rica expresa su compromiso de impulsar las transformaciones necesarias, con el fin de lograr un desarrollo inclusivo, sostenible con el ambiente y que garantice el cierre de brechas de derechos humanos; todo ello, pese a los posibles efectos en su avance por la postpandemia. Por supuesto, el turismo es relevante en este compromiso, además, por estar declarada una actividad de alta prioridad nacional, notificado mediante Decreto Ejecutivo 30455-P-TUR-MOPT-H-S del 8 de mayo del 2002, y que aporta, además, directa o indirectamente a los esfuerzos de los 17 objetivos, particularmente, en la generación de empleos inclusivos de calidad (objetivo 8) y en el mejoramiento del cambio climático (objetivo 13).
Además, la ruta se define tomando en cuenta el concepto que brinda la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), relacionado con el tema de los servicios creativos y modernos para el comercio y desarrollo sostenible, los cuales están basados en el conocimiento, con la aplicación de la alta tecnología y mano de obra calificada para incorporar las innovaciones tecnológicas, que posibilitan la transformación productiva de las economías.
Área de estudio
El área de estudio del presente artículo es el turismo en Costa Rica, esto desde la perspectiva de convertirse en parte de la oferta que se puede brindar dentro de las características de los servicios modernos, creativos e innovadores como parte de los esfuerzos que el país impulsa para aportar a su desarrollo sostenible.
Características generales
En Costa Rica, el turismo ha tomado una posición relevante en la economía nacional, el presente apartado muestra una caracterización de su comportamiento en los últimos años, particularmente, por ser una actividad declarada de alta prioridad nacional, tal como se mencionó en el apartado previo, por lo cual es indispensable fortalecer la participación estratégica de la actividad turística en el desarrollo nacional y consolidar el turismo como la principal actividad económica sostenible del país.
En el siguiente mapa (ver Figura 1) se presenta la distribución de los territorios de Costa Rica, organizado por unidades de planificación, centros de distribución, de desarrollo, de excursión y corredores de estadía.
Como se puede observar en la figura anterior, el país cuenta con una gran diversidad de sitios para realizar turismo, distribuidos en todo el territorio de Costa Rica, lo que permite tener una visitación de diversos segmentos provenientes del extranjero.
Según el Instituto Costarricense de Turismo (ICT) (2023), en general, el perfil de personas turistas que vienen a Costa Rica corresponden al nivel de ingresos medios y altos, a quienes les interesa no el consumo de productos masivos, sino que demuestran un interés de trasladarse por todo el país y autogestionarse. Entre el período de enero a junio es de 1 338 303 de llegadas de turistas (19,4% más que el primer semestre del 2022).
En el primer semestre del año, América del Norte, registró 977 783 turistas por la vía aérea, cifra superior en 21% al dato del 2022. Por países, Estados Unidos suma 792 944, Canadá 148 973 turistas y México 35 866 personas; lo que hace que el crecimiento, en comparación al año previo, sea de dos dígitos. Europa como región, durante los 6 primeros meses del 2023, aumenta 9,3% con respecto al mismo período del 2022, y contabiliza la llegada de 225 617 turistas. (ICT, p.17.2023)
Aunado a la promoción, nuestro país ha realizado importantes esfuerzos para visibilizar los aportes del turismo a la economía; siendo la cuenta satélite una herramienta clave para su cuantificación. Para el caso de Costa Rica, el análisis de los datos oficiales registrados en la cuenta satélite de turismo del Banco Central (2019) permite estimar el aporte de los servicios creativos, innovadores y modernos, cuyo valor agregado corresponde a un 10.38% del valor agregado de la economía total, es decir, 3,637,691 de 35,047,969 millones de colones; siendo las primeras actividades de consultoría en gestión financiera, recursos humanos, mercadeo, oficinas principales y afines (3.58%), seguidas de los servicios de información, programación y consultoría informática, edición de programas informáticos y afines (2.73%), actividades de telecomunicaciones (1.68%), otras actividades profesionales, científicas y técnicas (0.85%), actividades de producción de películas, videos y programas de televisión, grabación de sonido, edición de música, programación y transmisión (0.36%) y actividades de arrendamiento de propiedad intelectual y productos similares, excepto obras protegidas por derechos de autor (0.36%).
A este respecto es importante resaltar que en la sección de metodología del presente documento se menciona, que la identificación de estas actividades estuvo a cargo de las investigadoras, dado su ausencia en los registros oficiales. Por su parte, según los datos del BCCR, el porcentaje del aporte en la última década de la actividad turística al PIB de Costa Rica fue de aproximadamente 5% (ver Figura 2).
En el 2012 esta actividad inicia con un ascenso pasando a un 4,4 al 2016 (5% de aporte al PIB), alcanzando su máximo aporte con una leve caída antes de la llegada de la Pandemia por la COVID-19, lo que impulsó, aceleradamente, a un 1,9% en el 2020, esto como resultado de las medidas sanitarias de aislamiento internacional. Por su parte, la cuenta satélite del turismo se encuentra actualizada al 2019, por lo que se presenta hasta el 2020 (primer año de pandemia y excluyendo post pandemia). Es importante destacar que, durante dicho año, en el ámbito mundial, fue una de las actividades económicas que más sufrió impacto por las limitaciones de desplazamiento entre los diversos mercados continentales, incluso las restricciones de movilidad del mercado interno. Otro aspecto por considerar es la creación de más empleos, tanto directos como indirectos, lo cual puede traducirse en un crecimiento en la economía de un país o un determinado territorio (ver Figura 3).
Un elemento fundamental para el desarrollo se relaciona directamente con la generación de empleos de calidad e incluyentes, debido a que permite una mayor y mejor redistribución de los ingresos, con lo que se facilita que los hogares de bajos recursos puedan superar la pobreza o pobreza extrema. El incremento del empleo productivo y, por supuesto, decente, es la ruta hacia el crecimiento, la diversificación de las economías y el buen vivir. La composición dentro de la generación de empleos, por parte de la actividad turística en Costa Rica, es de un 33% para el directo, y un 67% para el indirecto.
Otro factor por considerar es el aporte de la actividad turística costarricense al logro de la Agenda 2030 y de los Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS), lo cual se enmarca desde la introducción de dicho documento, y señala:
El lento crecimiento económico mundial, las desigualdades sociales y la degradación ambiental que son característicos de nuestra realidad actual presentan desafíos sin precedentes para la comunidad internacional. En efecto, estamos frente a un cambio de época: la opción de continuar con los mismos patrones de producción, energía y consumo ya no es viable, lo que hace necesario transformar el paradigma de desarrollo dominante en uno que nos lleve por la vía del desarrollo sostenible inclusivo y con visión a largo plazo. (ONU, 2018, p.7)
Esto lleva a la necesidad de una forma creativa e innovadora de impulsar las diversas actividades productivas, como lo es el caso del turismo, el cual se encuentra reflejado en los Objetivos 8, 12 y 14, relacionados con el desarrollo económico sostenible e inclusivo, la producción y consumo sostenibles, y el uso sostenible de los océanos y de los recursos marinos de todos los espacios físicos del país.
El ODS 8 está orientado a promover el crecimiento económico sostenido, inclusivo y sostenible, el empleo pleno y productivo, y el trabajo decente para todos, esto, a su vez, incluye la meta 8.9: “De aquí a 2030, elaborar y poner en práctica políticas encaminadas a promover un turismo sostenible que cree puestos de trabajo y promueva la cultura y los productos locales” (ONU, 2018, p.41), lo que impulsa generar productos y estrategias innovadoras y creativas para la actividad.
Por su parte, el ODS 12 se centra en garantizar modalidades de consumo y producción sostenibles, y en la meta 12.b, señala: “Elaborar y aplicar instrumentos para vigilar los efectos en el desarrollo sostenible, a fin de lograr un turismo sostenible que cree puestos de trabajo y promueva la cultura y los productos locales”. (ONU, 2018, p.57); lo que enmarca tanto el tema de la generación de empleos como el respeto al ambiente y el marco de la sostenibilidad de la actividad turística. Además, el ODS 14, que se orienta a “conservar y utilizar sosteniblemente los océanos, los mares y los recursos marinos para el desarrollo sostenible”. (ONU, 2018, p.63).
Referente teórico y elementos contextuales
“Los servicios modernos basados en el conocimiento, es decir, aquellos que utilizan alta tecnología y/o cuentan con mano de obra calificada que se requiere para incorporar las innovaciones tecnológicas, son fundamentales para promover la transformación productiva de las economías” (CEPAL, 2022a, p. 1).
El adecuado desenvolvimiento de las actividades productivas requiere de la innovación. Un entorno de este tipo debe estar integrado en los distintos ámbitos de toma de decisiones del sistema económico. En este sentido:
El término innovación se refiere a aquel cambio que introduce alguna novedad o varias en un ámbito, un contexto o producto. Para que un sistema pueda perpetuarse debe evolucionar integralmente lo que significa que las relaciones entre los actores (turistas, empresas, destino, mercado y transporte) deben fortalecerse y ampliarse en la dirección de los objetivos perseguidos. La innovación es ingrediente necesario para mantener la complejidad y permanencia de las relaciones en el tiempo y supone la introducción de cambios que terminen por hacer crecer las relaciones entre las partes del sistema. (ICT, 2017, p. 15)
Lo anterior conlleva a discutir la importancia de un engranaje de diferentes actores que conforman un sistema de innovación, que potencialice y aglutine los esfuerzos que propicien el mejoramiento del crecimiento económico en el marco de distintas actividades ligadas a los servicios, como lo es el turismo.
Como resultado de los esfuerzos de innovación y creatividad en los procesos productivos de la economía, particularmente a los servicios, que es lo que atañe a este artículo, se puede reflejar su aporte mediante los encadenamientos productivos; los cuales se relacionan con los vínculos entre empresas u organizaciones que convergen en diferentes eslabones de un determinado proceso productivo, o sea, los encadenamientos hacia atrás son una relación insumos-demanda, mientras que los encadenamientos hacia delante se muestran como una vinculación de oferta.
Para el análisis de los posibles encadenamientos, se tomará como referencia el análisis input-output, el cual organiza la economía nacional en N actividades productivas, siguiendo el método que propuso Leontief en 1985, que se relaciona con un análisis de los flujos intersectoriales, o interactividades, con el propósito de determinar el efecto hacia adelante que un incremento o decrecimiento en una de las actividades afecta al resto con las cuales se encuentra encadenada de alguna manera, tanto a nivel de la producción agregada, como de los empleos directos o indirectos.
Los encadenamientos antes mencionados implican la creación de empleo dentro de las economías, los generados por una actividad, como lo es el caso del turismo, se esperaría que fueran en condiciones de calidad, entiéndase esta como el cumplimiento de las expectativas que brinden satisfacción a las necesidades de los trabajadores en las mejores condiciones en su lugar de trabajo. Por su parte, los empleos inclusivos se refieren a la inserción laboral de población vulnerable desde una perspectiva articulada y eficiente.
Todo lo anterior siempre se enmarca en un determinado territorio que potencializa los diversos recursos con que se cuenta, generando un interés turístico, debido a las condiciones naturales y el patrimonio cultural e histórico que se conforman en los diferentes factores geográficos que intervienen en la localización turística.
Dichas condiciones posibilitan un territorio en el desenvolvimiento de la actividad turística desde diversas aristas como las físicas-naturales, económicas, políticas e históricas, con las que se genera una oferta variada al mercado interno y externo. Costa Rica, en su pequeño territorio, tiene la posibilidad de ofrecer una gran biodiversidad al consumidor turístico.
Metodología
La metodología para la obtención de los resultados, se orienta hacia el análisis de la data disponible con su respectivo procesamiento, adicionado con entrevistas a especialistas en las actividades turísticas, así como la revisión de diversos documentos relacionados con el enfoque teórico y metodológico que permiten una mejor comprensión y análisis del fenómeno estudiado, además de otros recursos que den un mayor panorama de diagnóstico, facilitando la determinación de tendencias, considerando la situación de la pandemia por la COVID-19.
El tratamiento de los datos cuantitativos implica trabajar con cifras oficiales provenientes del Banco Central de Costa Rica (BCCR), que incluyen: cuentas nacionales, Matriz Insumo Producto y las cuentas satélites de turismo y ambiente. Mismas que no incluyen, explícitamente, categorías ligadas a los servicios creativos, modernos e innovadores que, potencialmente, estén ligados al turismo. Ante esta ausencia, las investigadoras crean una perspectiva derivada de un profundo análisis de los datos y metodologías de cálculo existentes para conseguir identificar las actividades que se pueden encadenar con las señaladas en los registros oficiales.
Por otra parte, se analiza el comportamiento de la visitación de personas turistas que incluyen, tanto las del ICT (llegadas internacionales a Costa Rica), como las del SINAC (lo reportado en relación con las Área Silvestres Protegidas (ASP). Mientras que la información cualitativa se deriva de la consulta a personas expertas, tanto del ámbito privado, como del público, en diversas temáticas ligadas al turismo con enfoque de innovación y creatividad.
Del sector privado se entrevistó a la directora ejecutiva de la Cámara Nacional de Comercio (CANATUR), la cual aglutina una parte importante de las empresas formales que llevan a cabo la actividad; y, de parte del sector público, a dos personas representantes del ICT relacionados con la recopilación de las estadísticas de los consumidores de los diversos productos ofrecidos en el mercado costarricense y personero que se relaciona con los planes regionales del Instituto y su ejecución.
Tomando en consideración esto, el enfoque es mixto debido a que se abordan, integralmente, datos cuantitativos y cualitativos, permitiendo un análisis conjunto que posibilita llegar a conclusiones y recomendaciones válidas. Por su parte, se puede indicar entre las principales limitaciones el acceso a información robusta, desagregada y, en algunos casos, desactualizada. Además, pese a las solicitudes ante las instancias correspondientes, no se obtuvo el detalle de cifras por territorios.
Resultados
En el proceso de determinar una ruta hacia la oferta de los servicios turísticos como parte del desarrollo sostenible de Costa Rica, se generó una serie de información desde la perspectiva pública y privada, con el propósito de analizar los diversos esfuerzos y demandas de esta actividad productiva, por lo que las rutas turísticas que responden a las necesidades o deseos de los mercados se convierten en un foco de promoción para el desarrollo territorial y de sus habitantes, por lo que, a su vez, surgen oportunidades de creación de empleo directos e indirectos mediante la creación de nuevas empresas y emprendimientos que faciliten su crecimiento.
De acuerdo con la CANATUR, la cual aglutina cámaras regionales y empresas ligadas directamente a la actividad1, se determinó que, pese que hasta antes de la pandemia el desempeño turístico del país fue bastante bueno, está obligado a salir de la “zona de confort”, debido a los esfuerzos que otros países de la región estaban haciendo para mantenerse como una oferta atractiva pese a las consecuencias de la COVID-19, situación que, a través de las entrevistas y conversaciones con personas funcionarias del ICT, como Calvo (2022), concuerdan en la necesidad de diversificar la oferta y los nichos de mercado con el propósito de atraer más turistas, lo que incluye países no tradicionales para Costa Rica, como lo han sido Estados Unidos, Canadá y Centroamérica. Quesada y Sánchez (2022) coinciden con el ICT en que debe existir una diversificación de mercados de donde se atraen turistas (abandonando la zona de confort asociada con EE. UU., Canadá y algunos países de Europa).
Por otra parte, Calvo indica que, para las posibilidades de generar o fortalecer la cartera de oferta con servicios creativos e innovadores al mercado turístico, se determinaron las siguientes opciones, validado con el sector privado.
El producto turístico costarricense se ha ido alineando a los gustos del mercado asiático, que es una zona del mundo que se recuperó más rápido después de la pandemia, tiene poder económico y quiere experimentar nuevas experiencias (avistamiento de aves, turismo de bienestar). Costa Rica ya tiene desarrollado estos temas de forma más robusta que el resto de la región, superando la mayor barrera que fue la visa, que se solicitaba diplomáticamente a las personas residentes de China (país que está emitiendo más turistas al mundo).
Durante el Gobierno de Carlos Alvarado, se crea un protocolo específico para exonerar de esta visa a turistas provenientes de Shanghái y Beijing que pudieron demostrar antes de salir de su país de origen que habían comprado un paquete turístico a un proveedor nacional verificado, tanto por el ICT, como por CANATUR. En el gobierno actual, la estrategia es promover y promocionar nuestro país en China. También se inauguró vuelo directo hacia República Dominicana, que nunca se había explorado, así como el resto de las islas del Caribe, Colombia, Chile, Argentina y Perú (países con conectividad sencilla y sin barrera de idioma, pero que nunca había sido de interés para Costa Rica debido a los vuelos llenos procedentes de Nueva York y Canadá.
La diversidad tanto de mercados como de productos, aprovechando la pandemia y un momento político favorable con la asamblea legislativa pasada, con diputados afines a la actividad turística. Los nómadas digitales son un sector muy atractivo, con altos ingresos, largas estadías y encadena otras actividades que no son, necesariamente, turísticas, por lo que viene muy bien para validar el modelo de desarrollo turístico.
En entrevistas con CANATUR, la industria fílmica de Hollywood ha señalado que Costa Rica cuenta con el potencial para “despegar” con el establecimiento de estudios de producción que, dada la cercanía con EE. UU., personas que hablan inglés, artistas, actores, productores y diseñadores digitales, aunado a la presencia de playas, volcanes y montañas, hacen posible filmar una película sobre cualquier tema. La atracción tanto de inversión como de turismo fílmico está sustentada en una ley que se aprobó durante la pandemia.
Otros productos turísticos con mucho futuro incluyen: el turismo médico, que ya se da, pero al ingresar al país se registran como turistas que no especifican su propósito, a diferencia de los nómadas que ingresan con una visa particular, su trazabilidad se pierde en los datos oficiales y es imposible evidenciar realmente su magnitud y contribuciones. También se aprobó una ley para la promoción de servicios de salud bastante importante, porque va a empezar a generar datos y autorizar al ICT para hacer promoción de servicios de salud asociados al turismo, así como al turismo de bienestar/“wellness” (que está más desarrollado y promocionado actualmente, por ejemplo, retiros de yoga, termalismo, terapias de bosque, entre otros), que, aunque no se visualiza como innovador sí tiene mucho potencial para crecer (misticismo en volcanes y energías).
En el turismo astrológico o astroturismo existe un mercado enorme, muy especializado, de alto poder adquisitivo, muy exigente, sofisticado, que requiere de una atención personalizada y representa una persona turista que está dispuesta a pagar 2 o 3 veces más en un país donde sus equipos estén seguros, destinos en volcán y montañas, por ser científico, de avistamiento y fotografía. Tenemos mucho potencial, y los otros países de la región centroamericana no lo están haciendo, lo más cercano es el turismo Maya en el Triángulo Norte, pero su connotación no es científica sino más bien cultural.
La competencia sería Perú y Argentina si lo llevan a cabo.
En cuanto a la accesibilidad e inclusión, la meta será seguirse convirtiendo en un destino accesible para todas las personas, sean adultas mayores, con discapacidad, que tienen altos ingresos y requieren atracciones adaptadas como el “canopy” en silla de ruedas o playas y parques nacionales accesibles, que ya se hacen, pero podría potenciarse aún más nuestra cultura del respeto a los derechos de estas personas a tener una vida plena con los servicios turísticos como la recreación. Aún falta mejorar en carreteras, aceras, cambiadores, entre otros.
En apoyo a los citados esfuerzos, Costa Rica debe orientar su oferta educativa hacia esas áreas potenciales para atraer turismo. Lo que se imparte en la actualidad se orienta, tanto a nivel público, como privado, y a nivel técnico como el Instituto Nacional de Aprendizaje (INA), a tres especialidades: alojamiento, gastronomía y servicios turísticos, y para considerar los servicios innovadores, modernos y creativos resaltan los programas de guía de turistas en historia y cultura, de aventura en cables y cuerdas, y en travesías. Por su parte, el Ministerio de Educación Pública (MEP) mantiene programas más tradicionales ligados al inglés, turismo rural, ecológico y costero.
Tomando en cuenta las universidades privadas, un total de 10 universidades ofrecen programas educativos en turismo, que en su mayoría se relacionan con administración hotelera, finanzas y legislación para empresas turísticas; resaltando la gestión del turismo ecológico, sostenible y regenerativo como potenciales mecanismos para fortalecer los servicios los servicios innovadores, modernos y creativos, de los cuales se ha comentado en secciones previas. Es muy importante que toda la oferta educativa se alinee a los planes y políticas públicas, de tal forma que se desarrollen, más fuertemente, las capacidades y competencias que las personas requieren para robustecer la actividad turística costarricense.
En complemento a lo anterior, desde el ICT se ofrece la percepción de la orientación de actividades creativas y modernas, para lo cual, el país cuenta con las condiciones para hacerlo, las vinculan de manera directa con lo relacionado al cambio climático, así como: “el turismo social con inclusión universal para personas con condición diferente, desarrollo de ciudades inteligentes para acceso universal, desarrollo de una nueva generación de productos continuados en los que somos líderes como turismo regenerativo entre otros” (Quesada y Sánchez, 2022, s.p.).
Lo anterior es posible desde la perspectiva pública, pues se afirma que, dada la existencia de las condiciones, debido a que iniciamos primero en el mercado y hemos madurado los conceptos con experimentación constante tanto en naturaleza como en interacción social, y con el crecimiento en el bienestar de las comunidades de destino y la necesaria rentabilidad de todos los procesos, apoyados por una marca país que ha crecido en prestigio internacional por una serie de reconocimientos recibidos.
Desde la perspectiva privada y pública, especializadas en las actividades turísticas, se reconoce la capacidad que tiene el país de dar respuesta a un mercado, nacional e internacional de ampliar la oferta con servicios no tradicionales para el país, para lo cual se han aprobado leyes como la Ley 10008, para atraer trabajadores y prestadores remotos de servicios de carácter internacional, aprobada el 11 de agosto del 2021; así como la Ley 10071 de atracción de inversiones fílmica en Costa Rica. Orientado a todo lo indicado en los Planes de Desarrollo Turísticos de Costa Rica, el país ha venido incorporando el tema de la innovación como parte de los ejes estratégicos vinculados a las políticas públicas.
Es relevante entender la importancia de adaptarse a los constantes cambios generados, no solo por la Pandemia por la COVID-19, sino también por otros aspectos relacionados con los gustos y preferencias de los consumidores a quienes se dirigen los servicios turísticos, a sus necesidades y deseos, tendencias y, por supuesto, a la oferta y demanda de innumerables productos complementarios y sustitutos. El modelo de negocio es parte también integral de la creatividad y la innovación, para hacer frente a los mercados nacionales e internacionales, tanto en encadenamientos con los agentes intermedios, como con el consumidor final. Hoy día no se concibe un negocio donde la creatividad y los productos y servicios modernos no estén presentes.
Según los datos del ICT (2023b), las llegadas internacionales a Costa Rica por todas las vías2 han venido creciendo de forma continua desde el 2010 hasta el 2019. Esto por cuanto pasaron de 2,099,829 hasta 3,139,008 personas. Estos turistas consumieron diversos bienes y servicios vendidos por distintas actividades productivas que, a su vez, generaron empleos directos e indirectos. En el caso de los primeros, la cuenta satélite de turismo (2019) reporta la existencia de 24,356 establecimientos en la industria turística, que generan un total de 368,477 personas ocupadas. Los datos oficiales señalan que la mayoría de las personas ligadas al turismo son asalariados (60.7%), seguido por cuenta propia (26.3%), patronos (6.5%), no remunerados (3.2%) y otros establecimientos (3.1%). Tal como lo muestra la Tabla 1, las actividades productivas asociadas con el turismo corresponden al 15.5% del total de empleo de la economía3
Industrias turisticas | Número de establecimientos | Asalariados | Cuenta propia | Patronos | Trabajadores familiares no remunerados | Otros trabajadores no remunerados | Otros Establecimientos | Total ocupados |
---|---|---|---|---|---|---|---|---|
A.1. Productos caracteristicos del turismo | 14686 | 148029 | 84212 | 19503 | 3253 | 8616 | 8634 | 272247 |
A.2. Servicios conexoas del Turismo | 9670 | 75943 | 12695 | 4624 | 0 | 38 | 2929 | 96230 |
Total de empleo Industrias turisticas | 24356 | 223972 | 96907 | 24128 | 3253 | 8654 | 11563 | 368477 |
Total Empleo Economia | 1832951 | 368662 | 107287 | 13816 | 35065 | 21561 | 2379342 | |
% industrias relacionadas con el turismo | 12.22% | 26.29% | 22.49% | 23.55% | 24.68% | 53.63% | 15.49% |
Elaboración propia, con datos de CST y BCCR (2022).
De acuerdo con el ICT (2017), históricamente, la estimación general de empleos indirectos para el turismo se ha considerado en una relación 3:1, es decir que se crean 3 empleos indirectos por cada empleo directo reportado. Siguiendo esta proporción, el total de 368,477 personas ocupadas en empleo directo mostrado en la Tabla 1 se traduce en 110,541 empleos indirectos.
Post Pandemia, los datos publicados corresponden, únicamente, a visitación y se usan como referencia para las publicaciones en el ámbito nacional, presentando el inconveniente de estar agregados. Como resultado de esto, surge la dificultad de realizar comparaciones con la información registrada antes de la pandemia. De igual forma, menciona Calvo, la actividad turística requiere analizar otras variables como el gasto promedio o el tipo de personas turistas que ingresan, pero esto es imposible debido a la estructura de los datos actuales que, aunque son útiles como punto de partida, si no se desagregan, se quedan cortos para mostrar la ruta de recuperación que está teniendo el sector. En este punto, se requiere aclarar que, a través del Macroproceso de Planeamiento y Desarrollo, con la aplicación de las Encuestas de No Residentes aéreas y terrestre, se ha determinado que para el 2014 el gasto promedio era $1002,2, lo que ascendió para el 2023 a $1470,3
Junto con las variables antes mencionadas, el ambiente es fundamental para garantizar la actividad turística que se desarrolla en territorios que proveen servicios ecosistémicos como belleza escénica. A este respecto, el INEC (2020) explica que Costa Rica cuenta con un 25% de su territorio como Área Silvestre Protegida (ASP), mientras un 48,87% de las aguas territoriales es Área Marina Protegida (AMP), espacios que hacen posible la visita de turistas y sus consecuentes efectos sobre el empleo, tanto directo como indirecto, antes mencionados.
Dado que los ecosistemas naturales son la base material para la oferta turística sostenible, la visitación a las ASP constituye otro valioso aporte al empleo y la dinamización de la actividad turística, como se puede observar en la figura 5, el país posee, prácticamente en todo el territorio, áreas silvestres visitadas en mayor o menor medida. Según datos del SINAC, un total de 2,452,209 personas ingresaron a 43 ASP durante el 2022, de las cuales el 57% son no residentes, es decir 1,4049,34 personas, y el resto, 1.404.934, residentes. Manteniéndose el Parque Nacional Manuel Antonio y el Parque Nacional Marino Ballena como los dos más concurridos por todos los visitantes, con un 18,99% y un 10,63% respectivamente.
La biodiversidad costarricense presente en sus ASP es indispensable para la actividad turística. La flora, fauna, y demás riqueza natural sostiene las actividades que se generan en los territorios involucrados, haciendo posible el crecimiento económico local y nacional, requisito para la reactivación postpandemia, que potencialmente se beneficiaría con la Ruta mostrada a continuación, tanto en el dinamismo económico generando empleos directos e indirectos a los territorios involucrados.
Discusión de resultados
De acuerdo con la CEPAL (2022b), en un contexto post pandemia, el sector del turismo deberá reconstruirse de una manera más inclusiva, sostenible y resiliente. Por lo que se requiere mayor inversión en salud, seguridad y gestión de riesgos, trabajar para ofrecer condiciones laborales, empresariales y socioeconómicas favorables e inclusivas, entendiendo el papel cada vez más relevante de la sostenibilidad ambiental, aprovechar las ventajas de la digitalización y fomentar la cooperación entre los países para garantizar respuestas resilientes frente a futuras crisis.
Para esto, es relevante contar con una ruta clara por parte de la actividad turística para un adecuado desarrollo sostenible e inclusivo, que posibilite empleos de calidad y favorezca una mejor redistribución de la riqueza entre los habitantes de Costa Rica que se benefician de manera directa e indirecta en prestar toda la cartera de servicios; particularmente, en aquellos que se enmarcan como innovadores, modernos y creativos, como los mencionados supra.
Por supuesto que la ruta debe enmarcarse con los ODS, pese a los posibles efectos en su avance por la pandemia, ya que son relevantes para el logro del desarrollo sostenible, dado que el turismo aporta directa o indirectamente a los esfuerzos de los 17 objetivos, particularmente, en la generación de empleos inclusivos de calidad (objetivo 8) y en el mejoramiento del cambio climático (objetivo 13), tomando en cuenta que se requieren esfuerzos para mitigar el aumento de los gases de efecto invernadero y el consecuente incremento de la temperatura global. La actividad del turismo está involucrada de manera directa con dichas situaciones, tanto por la capacidad de carga de los sitios visitados, como por la oferta de la diversidad de los productos o servicios que se presenta, los cuales dependen de los ecosistemas como elemento relevante de los atractivos, el agua y los paisajes; condiciones que son sensibles a variaciones climáticas.
Las rutas turísticas articuladas a los gustos y preferencias de los consumidores potenciales colaboran de manera directa con el desarrollo territorial, impulsando las oportunidades de crecimiento económico y una mejor distribución del ingreso local.
Adicionalmente, se debe de tomar en cuenta la necesidad de estar teniendo un claro control en varios niveles de la ruta; primero, el avance real del cumplimiento de los ODS, como compromiso de país; segundo, el avance de las variables macroeconómicas del mercado interno y un monitoreo constante de las internacionales que afectan los ingresos y los precios en los diversos mercados, con el propósito de generar estrategias que contengan posibles efectos sobre la actividad ante la situación económica nacional y mundial y los compromisos adquiridos por Costa Rica.
Si bien es cierto, la orientación hacia el generar productos innovadores y amigables con el ambiente, como un diferenciador ante los mercados internacionales, se presenta de manera sostenida en los diversos planes, también es fundamental que la oferta educativa, pública y privada, técnica, de grado y posgrado, sea coherente, generando el perfil que se requiere en estos momentos para fortalecer y diversificar la actividad turística, permitiendo incorporar innovaciones tecnológicas fundamentales para apoyar y promover la transformación productiva de los territorios en las economías como las latinoamericanas, todo ello apoyado en inversión en infraestructura, tanto a nivel tecnológico como físico.
Una decisión necesaria a nivel del país es la modificación de la ley general de turismo, con el propósito de que exista un ente rector de la actividad, tomando en cuenta su aporte a la economía y al bienestar de la sociedad costarricense que, además, a través de un Decreto Ejecutivo 30455-P-TUR-MOPT-H-S del 8 de mayo del 2002, se declaró en Costa Rica de interés nacional y de alta prioridad la actividad socioeconómica del turismo, esto debido a que la función principal del ICT se limita a la promoción, siendo necesario para el fortalecimiento de la institucionalidad su regulación, autorización y control en la ruta al mejoramiento de la actividad en discusión, incluida la definición de la Marca País “Esencial COSTA RICA”, que fue lanzada en el mercado nacional en setiembre de 2013 e internacionalmente en enero de 2014, con el objetivo de promover el turismo, impulsar las exportaciones y atraer inversión de una forma conjunta.
Por su parte, se debe mantener una evaluación ex ante, concomitante y ex post que permita, de manera oportuna, la toma de decisiones relacionadas a las políticas públicas, estrategias y objetivos de los últimos periodos, para potencializar dicha actividad, convergente con el fortalecimiento en el marco del aporte al comercio y al desarrollo sostenible del país de manera inclusiva, para ello el país requiere hacer un esfuerzo en la generación y actualización de datos que permitan determinar. de manera más precisa, el valor agregado que se da a la producción, empleo, redistribución del ingreso y los encadenamientos productivos que brindan la posibilidad de dinamizar otras actividades productivas del país.
El reto de política, según CEPAL (2022a), es lograr que las dinámicas creativas y de innovación vayan por delante y superen las dinámicas destructivas, y que los sectores sociales y laborales afectados se beneficien de sistemas de protección social y de políticas activas de mercado laboral (inserción y entrenamiento) para aprovechar las oportunidades del nuevo mundo del trabajo que la revolución tecnológica y digital está creando.
Calvo señala que, para coadyuvar en la eventual ejecución de la ruta planteada, es necesario el fortalecimiento de las cuentas satélites de turismo y la ambiental, lo que se requiere para posibilitar la toma de decisiones debidamente informada alrededor de una actividad productiva fundamental como el turismo en Costa Rica; esto, además, es apoyado desde la representación del sector privado cuando indica, lo siguiente, relacionado con los principales desafíos persisten del país en la materia de Información de calidad, actualizada y robusta, pues no existen requisitos específicos o licencia, ni siquiera otorgada por el ICT, para que una empresa brinde servicios turísticos4.
Como resultado, no existe obligatoriedad, tampoco un registro nacional de empresas turísticas y las cámaras empresariales realizan sondeos internos entre sus organizaciones afiliadas (no tienen la rigurosidad de una encuesta) para conocer información específica sobre situaciones de interés, por ejemplo, el estado de las carreteras durante un evento hidrometereológico.
En el tema de sostenibilidad, la barrera más notoria son las competencias interinstitucionales, dado que no es sólo el esfuerzo del ICT o la empresa privada, ya que hay municipios que, como gobiernos locales, se encargan de los planes reguladores, de la recolección y gestión de residuos, infraestructura pública, conducción de aguas, entre otros.
Las rutas turísticas pueden tener un papel fundamental en la promoción del desarrollo territorial por todos los efectos que se generan, incluyendo los encadenamientos productivos, pero para ello es relevante tener claro las ventajas y limitaciones de las diversas regiones que componen el territorio de todo el país, para que el diseño e implementación responda a sus características particulares y así aprovechar las oportunidades que presentan, convirtiendo a la actividad turística innovadora en parte de la estrategia para el desarrollo de los territorios