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Acta Médica Costarricense

On-line version ISSN 0001-6002Print version ISSN 0001-6012

Acta méd. costarric vol.44 n.3 San José Sep. 2002

 

Revisión
Malaria: una actualización
 
 
José Ignacio Castro-Sancho  1 , María del Rocio Munguía-Ramírez 2 , María Luisa Ávila-Agüero 1
 

 Descriptores: Diagnóstico; Prevención; Plasmodium falciparum; Plasmodium vivax; Plasmodiun ovale; Tratamiento; Resistencia medicamentosa; Nuevos antimaláricos.  

 Recibido: 20 de junio del 2002
Aceptado: 30 de julio del 2002 

Abreviaturas: Organización Mundial de la Salud (OMS), Factor de necrosis tumoral alfa (TNF-a), Plasmodium (P), diclorodifeniltricloroetano (DDT), enzymes linked immunosorbent assay (prueba enzimática de inmunoabsorbencia) (ELISA), polymerase chain reaction (reacción en cadena de polimerasa) (PCR).
 

La malaria es una enfermedad infecciosa producida por un protozoario del género Plasmodium 1 , cuyas cuatro especies son infectantes para el humano: P. falciparum, P. vivax, P.ovale y P. malariae. La picadura del Anopheles inocula de 10 a 100 esporozoítos que en 30 minutos están en el hígado 2 ,3 multiplicándose luego en los eritrocitos.

  Es un problema importante a nivel mundial, ocupando un lugar destacado en la agenda de la O.M.S. Cada año afecta de 300 a 500 millones de personas distribuidos en 100 países 4 , 6 , 7 de bajas condiciones sanitarias. 8      De los 30 millones de turistas que visitan anualmente países endémicos, entre 10,000 y 30,000 contraen la malaria. 4 Por año mueren de 1,1 a 2,7 millones de personas, mayormente por P. falciparum 9 , 10 , 11 , 12 predominando los niños de 5 años y las embarazadas 6 , 9 , 13 . Su control y erradicación es muy difícil porque factores como las guerras civiles, los cambios meteorológicos y ecológicos de áreas previamente libres de malaria, la economía de las naciones pobres, la ausencia de apoyo externo, el consejo técnico inadecuado y la insuficiente experiencia en el control de áreas altamente endémicas 14 , unidos a la creciente y diseminada resistencia medicamentosa desarrollada por el P. falciparum, han aumentado la morbimortalidad, sobre todo en países carentes de estrategias efectivas para prevenirla.

El inicio del control de vectores coincidió con el final de la construcción del Canal de Panamá en 1,914 y originó con el apoyo en 1,955 de la O.M.S. la campaña de fumigación con DDT, que produjo un descenso agudo de la malaria, en las naciones que aplicaron esa estrategia 15 , el abandono de esta condujo al mantenimiento del vector en muchos otros países. A finales de los años 50 se documenta en Asia y Sudamérica, la resistencia del Plasmodium a la cloroquina y en los setentaen Africa. 16 En la última década la resistencia del P. falciparum y el P. vivax ha sido creciente a los antimaláricos habituales, como los derivados de las quinolinas. 16 , 17 Estos miles de nuevos casos con resistencia medicamentosa detectados a nivel mundial son el mayor reto a vencer en el desarrollo de un programa efectivo de control contra dicha enfermedad, en países cuyas economías no permiten enfrentar los costos de los nuevos y efectivos medicamentos. Se estima que los costos directos e indirectos de la malaria en el continente negro superan los 3,600 millones de dólares al año 7 . Costa Rica tiene un área malárica de 35,436 Km 2 , equivalente al 69.5% del territorio nacional, 5 con características de endemia desde 1992. Las dos especies frecuentes en el país son el P. vivax y el P. ovale.

En su tratamiento se usa: la cloroquina y primaquina. En 1,998 se reportaron 5,198 casos de malaria, las regiones Huetar Atlántica y Huetar Norte contribuyeron con un 74.5% y en 1,999 el total nacional fue de 3,998 casos, en donde estas regiones aportaron el 72.1% 62, constituyendo las regiones más afectadas del país 1 . Esta revisión pretende ubicar al lector en la información más reciente sobre la malaria en aspectos tales como el diagnóstico, tratamiento y la prevención según los más recientes estudios publicados.   

    
Clasificación de la Malaria

La malaria clínicamente se clasifica en aguda, crónica y grave: 1 , 4 , 5
 

    1. Aguda: cuadro febril de inicio reciente con tendencia a la periodicidad en individuos sanos y no inmunes, asociando escalofríos, diaforesis profusa, aumento rápido de la temperatura corporal con un descenso periódico; acompañado de cefalea intensa, náuseas y vómitos. La duración del paroxismo es de 10 a 12 horas.

    Se presenta diariamente y luego cada 48 a 52 horas según la especie de Plasmodium (fiebre terciana, cuartana).

    2. Crónica: como resultado de la infección repetida en individuos semi-inmunes. Presentan anemia severa, baja parasitemia (<1%), hepatoesplenomegalia, deterioro general del organismo. La fiebre es poco usual.

    3. Grave: asociada al P. falciparum, puede mostrar un cuadro clínico y variado que incluye fiebre, escalofríos y cefalea. Es el responsable de la mayoría de las complicaciones derivadas de esta enfermedad.

La fiebre y escalofríos son los signos típicos de la malaria, pero varían según su etiología e incluso pueden no estar presentes 3 . El P. vivax produce cuadros recurrentes a intervalos de 48 horas, el P. falciparum presenta un ciclo irregular. El P. falciparum se hace patente de 9 a 10 días después de la infección 19 e incluso, años después de la exposición al parásito 20 . Se puede presentar anemia moderada y trombocitopenia leve de 50,000 a 100,000 17 . La esplenomegalia traduce enfermedad severa ó crónica 3 , reportándose casos de infartos esplénicos en malaria por P. Falciparum 29 . Las parasitemias masivas producen hemólisis con hemoglobinuria, afectando al riñón y provocando insuficiencia renal 28 .

El edema pulmonar se presenta con parasitemias de P. falciparum mayores al 5% de los eritrocitos circulantes infectados. Su causa hemodinámica no es cardiogénica, pero las presiones normales arteriales en los capilares pulmonares y la elevación de TNF- sugiere una patogénesis similar a la vista en la septicemia bacteriana 28 . La infección por P. falciparum en niños vómitos, dolor abdominal y diarrea, como resultado de la lesión de la microvasculatura gastrointestinal con esfacelación de la mucosa causando sangrado digestivo 17 .   

Malaria Grave o Complicada

Suele afectar con mayor frecuencia a niños preescolares y mujeres embarazadas. Su inicio es súbito o puede ocurrir posterior a un cuadro benigno sin complicaciones que no recibió tratamiento oportuno.

Puede evolucionar a defectos de coagulación, hemoglobinuria, hemorragias espontáneas, anemia, ictericia, taquicardia, diaforesis, hepatoesplenomegalia, insuficiencia renal, encefalopatía aguda, trastornos hidroelectrolíticos y ácido-base, edema pulmonar, choque, coma y muerte 4-5 .

La complicación más grave de la infección por P. falciparum es la malaria cerebral por su alta mortalidad. El paciente convulsiona debido al bloqueo capilar por eritrocitos parasitados, hipoglucemia y los efectos de citocinas como el TNF- , 28 entra en coma profundo y muere. Se presenta en un 2.5% de los pacientes 3 y del 15-50% fallecen. 3 , 21 , 22 , 23 , 24 , 25 . De los sobrevivientes, el 5-10% quedan incapacitados por daño cerebral 26 , 2 .

El paciente preescolar es el más afectado, aunque el adulto suele presentar un cuadro sintomatológico más prolongado (Cuadro 1 ). Las secuelas neurológicas suelen observarse en más del 10% de los pacientes pediátricos, pero su proceso patológico y la resolución del estado de coma es de un máximo de 2 días, en tanto que en el adulto, el cuadro grave dura hasta 7 días y la resolución del coma tarda hasta 4 días. Las principales complicaciones de la malaria, suelen estar asociadas a estos cuadros graves de la enfermedad.

   
 Pruebas diagnósticas

El medio más directo es el frotis teñido con Giemsa . Este permite observar las formas anulares o jóvenes del parásito, que circulan libres en la sangre periférica. Las formas maduras; trofozoítos pigmentados y esquizontes, del P. falciparum son las únicas que se adhieren al endotelio de las vénulas 31 , por lo que la observación de gametocitos (formas sexuales) es necesaria para su diagnóstico. Estos duran de 7 a 10 días para desarrollarse, por lo que no se encuentran en sangre periférica al inicio de los síntomas.

Casi el 5% de las personas con malaria tiene más de un tipo de parásito 28 , siendo el P. vivax y el P. falciparum las dos especies más extendidas, las infecciones combinadas de ambos están reportadas en la literatura 19 , 32 . La tinción de Giemsa permite observar las manchas de Schüffner típicas de esta infección, principalmente en aquellos casos de infección por P. Vivax 28 . La tinción fluorescente con naranja de acridina, detecta parásitos en sangre periférica. La menor densidad de los eritrocitos parasitados permite; mediante centrifugación, localizarlos en la parte superior de la capa eritrocítica. El examen dura de 30 a 40 segundos, siendo un método más rápido que el frotis grueso 2 .

Las sondas de DNA permiten el diagnóstico temprano del parásito en el mosquito, son específicas de especies de Plasmodium 33 pero su sensibilidad es muy limitada requiriendo de 1000 esporozoitos por mosquito para obtener una detección confiable 34 . La prueba de ELISA es útil de manera retrospectiva, en personas no inmunes tratadas en forma empírica, sin un diagnóstico microscópico 28 . Los anticuerpos monoclonales contra el Plasmodium se utilizan contra la proteína circumsporozoito 35 , 36 , 37 . Su valor es limitado al no detectar los esporozoitos inmaduros presentes en el oocisto 37 . En áreas endémicas, la mayoría de las personas tienen títulos de anticuerpos de infecciones previas, se hayan ó no infectado en fechas recientes y se requieren 3 a 4 semanas para elevar el título de anticuerpo al valor diagnóstico, en tanto que la decisión para el tratamiento se debe tomar en las primeras horas de la valoración.

La PCR no difiere en cuanto a especificidad con el ELISA, pero es relativamente más sensible que ésta en la detección de P. falciparum y P. vivax 33 .

Criterios de hospitalización 5

El paciente debe hospitalizarse en los siguientes casos: niños positivos con P. vivax o P. falciparum en mal estado general, sobre todo desnutridos y portadores de infección respiratoria aguda, mujeres embarazadas en mal estado general y todo paciente que presente fiebre, cefalea, emesis, ictericia, convulsiones, insuficiencia renal, insuficiencia respiratoria o coma, sospechoso de malaria por P. falciparum.


Tratamiento de la malaria
 
El tratamiento basado en los hallazgos clínicos, hace inevitable su aplicación a sujetos sanos, principalmente niños
18 , aumentando los costos, el riesgo de efectos adversos y la aparición de cepas parásitas resistentes a medicamentos 6 .

La parasitemia establece el índice de severidad de la infección y permite valorar la respuesta al tratamiento una vez finalizado 30 . El tratamiento de la malaria no complicada tiene tres objetivos 1) salvar la vida, 2) reducir la posibilidad de desarrollar complicaciones 50 y 3) lograr una rápida y sostenida eliminación del parásito de la sangre y de sus síntomas mediante una sola dosis o con un ciclo corto de tratamiento 51 . El tratamiento de elección cuando la etiología es por P. vivax, P. ovale , P. malariae o P. falciparum es la cloroquina ( Cuadro 2 ) 52 . En el P. falciparu resistente a ésta, la combinación de sulfato de quinina con tetraciclina es el tratamiento más efectivo 63 . Otras posibles elecciones incluyen quinidina, 24 , 63 quinina, pirimetamina-sulfadoxina y mefloquina. También se ha utilizado la pirimetamina-sulfadoxina como tratamiento de primera elección 52 ó en conjunto con cloroquina 53 .  En pacientes en coma, el tratamiento más seguro, dada su baja cardio-toxicidad a la dosis recomendada, es la quinidina intravenosa 28 pero debe vigilarse sus efectos cardiacos como la prolongación del segmento QT 63 . 

 

En Tailandia, Birmania y Camboya, el P. falciparum ha desarrollado una alta resistencia a la cloroquina, la pirimetamina/sulfadoxina, la quinina y a la mefloquina 54 .

Para evitar las recaídas por P. vivax ó P. ovale, la primaquina es el medicamento de elección, previa valoración de deficiencia de deshidrogenasa de glucosa-6-fosfato para evitar la hemólisis 55 .

Los medicamentos antimaláricos dihidroartemisinina, artesunato, artemether y arteether son derivados de la artemisinina; el principio activo aislado de la planta Artemisia annu a. Tienen acción gametocitocida y se utilizan en los casos de parásitos resistentes a la cloroquina 50 . Alivian los síntomas, reducen la parasitemia, aumentan las posibilidades de curación, de sobrevivencia y disminuyen los reservorios humanos 58 ,60 .

El artesunato, cuya corta vida reduce la posibilidad de desarrollar resistencia por parte del parásito, no se ha incluido en los esquemas de tratamiento, porque se han demostrado efectos adversos como disfunción cerebral temporal 61 .

Los esquemas monoterapéuticos han dado paso a terapias combinadas de gran efectividad y que evitan el rápido desarrollo de resistencia. La mefloquina; una metanol-quinolina, fue introducida al mercado cuando los parásitos ya habían desarrollado resistencia a la quinina 54 . Al combinarlacon artesunato 56 , 57 produce una rápida reducción de la parasitemia.El tratamiento radical a 5 días ( Cuadro 3 ); un esquema combinado, es el utilizado en Costa Rica, administrándose a todo paciente enfermo, presuntamente enfermo y a los convivientes y contactos sospechosos clínica y/o epidemiológicamente de padecer malaria 5 . La quinina y la quinidina estimulan directamente la liberación de insulina de las células pancreáticas beta lo cual representa un riesgo extra de hipoglicemia; una causa común de coma. Por ello, la venoclisis de glucosa es una medida auxiliar. En los casos de malaria cerebral están contraindicados los corticoesteroides; como la dexametasona y la hidrocortisona, debido la supresión de la inmunidad del huésped a la infección a pesar de que pueden reducir los efectos nocivos del edema cerebral 5 . 

 
   
Prevención de la malaria
 
En áreas endémicas la exposición repetida al parásito permite desarrollar una inmunidad natural a la malaria. En estas zonas las mujeres embarazadas tienen un mayor riesgo de infección por P. falciparum, disminuyendo en los embarazos subsecuentes, debido a la adquisición de anticuerpos 13 ,31 ,38 .

La quimioprofilaxis; consiste en la reducción del contacto con el vector a través de la administración de fármacos y el uso de repelentes de insectos para que personas no inmunes, expuestas a la malaria no la adquieran. Los fármacos deben ser seguros para las personas sanas y tener una vida media sérica prolongada, para que su administración sea poco frecuente. Ambos criterios hacen de la cloroquina el medicamento de elección en áreas sin P. falciparum resistente a la misma y el único seguro para embarazadas. En Costa Rica el esquema profiláctico está dirigido a aquellas personas que por motivo de viaje deben ingresar a zonas endémicas. Es importante explicar al usuario que este tratamiento solo previene la intensidad de la afección, ya que aún tomando este tratamiento, la enfermedad puede ser adquirida. El esquema preventivo está expuesto en la Cuadro 4
 

  La quimioprofilaxis para el P. falciparum resistente a la cloroquina 39 se realiza con mefloquina, aunque se han reportado casos resistentes a la misma y psicosis 40 . Una alternativa es la doxiciclina, que además reduce la frecuencia de diarrea. Sus desventajas incluyen su administración diaria y las reacciones de fotosensibilidad y vaginitis. No se recomiendan para la quimioprofilaxis la pirimetamina/sulfadoxina y la amodiaquina por las reacciones de hipersensibilidad y la granulocitosis y hepatitis que producen respectivamente.

El desarrollo de la vacuna para la malaria, se han centrado en el parásito, su crecimiento y su reproducción 43 , 44 . Las tres etapas del parásito en el hombre son antigénicamente diferentes, por lo cual la vacuna debe incluir al menos tres antígenos del parásito (esporozoito, merozoito y gametocito) 28 .

En el esporozoíto se expresan tres moléculas: la proteína circumsporozoíto, 45 , 46 la proteína anónima relacionada a tromboespondina 47 y la proteína rica en treonina y asparagina del esporozoíto 48 . Las dos primeras son necesarias en el proceso infectante del parásito y su multiplicación, haciéndolas candidatas al desarrollo de la vacuna 49 . La vacuna desarrollada por el científico colombiano Manuel Elkin Patarroyo, incluye cuatro moléculas aisladas del parásito y ha mostrado índices de eficacia que oscilan entre un 60% en Ecuador a un 35% en Brasil

Control de Vectores

Las enfermedades transmitidas por vectores se han considerado dentro de los más importantes problemas de salud en el mundo, afectando por igual a los países desarrollados y a los que están en vías de desarrollo. En algunos países, los programas de erradicación, han tenido efectos positivos, mientras que en otros, no son viables en unfuturo cercano, debido a problemas técnicos, de resistencia fisiológica, de comportamiento de algunos vectores a los insecticidas químicos, al desconocimiento de las especies vectoras, y fundamentalmente, a que no siempre estos programas están entre las prioridades de los gobiernos, y por lo tanto no cuentan con el adecuado soporte económico. Previamente a la selección de cualquier método, es necesario hacer una serie de análisis, ya que la lucha antivectorial no será posible sin información acerca de la biología y la ecología de los vectores, además de conocimiento de los factores socioeconómicos, culturales, estilo de vida y hábitos de la gente. Para disminuir el vector anofelino; principalmente en áreas hiperendémicas, se han utilizado repelentes de insectos que contienen DEET (N, N’ –dietil toluamida) y de mosquiteros y cortinas impregnados con insecticidas piretroides como la piretrina 41 . Esta técnica ha sido exitosa y su implementación se realizó posterior a la recomendación de no utilizar el DDT 42 .  

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1 Hospital Nacional de Niños, "Dr. Carlos Sáenz Herrera" Caja Costarricense de Seguro Social.

2 Intituto Nacional de Seguros.

Correspondencia: Dr. José I. Castro Sancho, Apartado Postal 31-1260
correo electrónico: joeignaz@yahoo.com

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