SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.44Central american contemporary cinema: Historical memory, conditions of production and execution author indexsubject indexarticles search
Home Pagealphabetic serial listing  

Services on Demand

Journal

Article

Indicators

Related links

  • Have no similar articlesSimilars in SciELO

Share


Anuario de Estudios Centroamericanos

On-line version ISSN 2215-4175Print version ISSN 0377-7316

Anuario de Estudios Centroamericanos vol.44  San José Jan./Dec. 2018

http://dx.doi.org/10.15517/aeca.v44i0.35724 

Presentación

Presentación

Carlos Sandoval García

Este 2018 ha sido particularmente difícil para las sociedades centroamericanas. Mientras tanto, la clase política parece quedarse muy corta frente a las demandas ciudadanas. A su vez, la ciudadanía manifiesta crecientes malestares con la política. En Guatemala, el presidente Jimmy Morales y otros poderosos actores políticos han manifestado su rechazo hacia la Comisión Internacional contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), un órgano independiente de apoyo al Ministerio Público, el cual surgió como una alternativa frente a la debilidad institucional del sistema judicial. La CICIG dio a conocer, por ejemplo, el caso de corrupción conocido como La Línea, que involucraba al entonces todavía presidente, Otto Pérez, y a su vicepresidenta, Roxana Baldetti, en una red de contrabando en las aduanas de Guatemala. Pérez y Baldetti, así como otras personas presuntamente involucradas, están privadas de libertad.

En Honduras, la reelección de Juan Orlando Hernández, en noviembre de 2017, estuvo acompañada de muchas interrogantes sobre el conteo de votos. Un año después, la llamada caravana de migrantes, que más evoca un éxodo, da cuenta no solo del llamado de la desesperanza, sino también la desesperación de quienes se rebuscan la vida todos los días. El aumento de un 20 por ciento de las tarifas eléctricas parece haber sido uno de los detonantes para que miles de personas decidieran caminar juntas más de dos mil kilómetros en busca del mal llamado “sueño americano”.

Las elecciones legislativas y municipales de El Salvador, celebradas en marzo de 2018, dieron como claro ganador al partido Alianza Republicana Nacionalista (ARENA) y confirmaron la pérdida de preferencias electorales del Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), en un contexto de sentida ausencia de oportunidades de empleo y de alternativas a la criminalidad y al control de territorio por parte de las pandillas. A pocos meses de las elecciones presidenciales, por celebrarse el domingo 3 de febrero 2019, Nabile Bukele, candidato de la Gran Alianza por la Unidad Nacional (GANA) supera en las encuestas a los candidatos de ARENA y del FMLN; en medio de una coyuntura marcada por casos de corrupción, dentro de los cuales se encuentran la condena al expresidente Antonio Saca y la orden de captura contra Mauricio Funes, también expresidente.

En Nicaragua, cambios en el Instituto Nicaragüense de Seguridad Social (INSS) dieron lugar a la movilización ciudadana contra el gobierno de Daniel Ortega. El derribamiento de los llamados “árboles de la vida” o “chayopalos”, en referencia su impulsora, Rosario Murillo, se convirtió en un símbolo de las movilizaciones. Transcurridos más de 7 meses, no se avizora una salida negociada a la crisis. En ocasión del aniversario de la Revolución, el 29 de julio, el tono del gobierno cambió.

Las protestas son nombradas como algo del pasado y a sus protagonistas se les categoriza como “terroristas”. El protagonismo de la jerarquía de la Iglesia católica cesó y el Consejo Superior de la Empresa Privada (COSEP), si bien nunca asumió el liderazgo de las protestas, ha mantenido un perfil aún más bajo. Las personas jóvenes y dirigentes campesinos sí que han sufrido las consecuencias de la represión. Un buen número han solicitado refugio en Costa Rica.

En Costa Rica, las elecciones presidenciales y legislativas se caracterizaron por el protagonismo de Restauración Nacional (RN), un partido político portavoz del neoconservadurismo neopentecostal, el cual ganó la primera ronda. En la segunda ronda, el llamado a votar por un gobierno de unidad nacional, con el apoyo del candidato del Partido Unidad Social Cristiana (PUSC), le dio el triunfo a Carlos Alvarado, candidato del Partido Acción Ciudadana (PAC). En la Asamblea Legislativa, el PAC es una fracción minoritaria, con lo cual la construcción de mayorías es una tarea permanente. En el segundo semestre del año la negociación de la reforma fiscal exhibe las dificultades para construir acuerdos en un contexto de incertidumbre económica. Las elecciones municipales, previstas para el año 2010, serán particularmente relevantes en este contexto.

El ciclo electoral en Centroamérica, el cual inició con las elecciones en Honduras, se cierra con las elecciones del 5 de mayo 2019 en Panamá. La coyuntura electoral panameña ha coincidido con la deportación del expresidente Ricardo Martinelli en junio de este año 2018. El Departamento de Estado de los Estados Unidos aprobó la solicitud de extradición cursada por la Corte Suprema de Justicia de Panamá por el caso de las escuchas ilegales a miembros de la oposición durante su gobierno (2009-2014). El expediente contra el expresidente panameño se basa en once denuncias presentadas por diputados, abogados, periodistas y líderes cívicos de la oposición víctimas de las intervenciones telefónicas sin autorización llevadas a cabo por el Consejo de Seguridad Nacional.

Esta coyuntura electoral exhibe amplias brechas entre las demandas de las sociedades centroamericanas y los intereses de las clases dirigentes, carcomidas por casos y más casos de corrupción. Dos personas hondureñas, entrevistadas por la BBC, mientras caminaban rumbo a México en el mes de octubre 2018, resumieron muy bien estas brechas. Una de ellas manifestó: “A mí si el Presidente de los Estados Unidos no le ayuda a Honduras no me interesa porque yo no recibo ayudas de él”. La otra, por su parte, concluyó: “No le tenemos miedo a las amenazas de Trump; venimos huyendo de nuestro país porque a nuestro país sí le tenemos miedo”.

En este complejo contexto, entregamos el volumen 44-2018 del Anuario de Estudios Centroamericanos, el más centroamericano de los que hemos publicado en muchos años, pues apenas 3 de los 16 artículos refieren exclusivamente a Costa Rica. Dos artículos son regionales, un artículo compara procesos en dos países y el resto son artículos que se distribuyen en los países del istmo, incluido Panamá, una sociedad sobre la que hemos publicado escasamente. Este volumen presenta también un balance entre artículos centrados en fenómenos contemporáneos como artículos concentrados en procesos históricos.

El volumen inicia con un dossier sobre “medios de comunicación y esfera pública”, un tema sobre el cual en muy pocas ocasiones se cuenta un panorama de conjunto de la región. Andrea Cabezas ofrece una visión panorámica de los modos en que la memoria histórica se expresa en la filmografía de la región, incluyendo sus condiciones de realización y producción.

Ana Silvia Monzón y Linda García Arenas afirman que, pese a la firma de los acuerdos de paz en 1996 en Guatemala, los grandes medios continuaron reproduciendo una visión hegemónica y homogénea del país, sin lugar para la diferencia, ni para la diversidad de identidades, estéticas, pensamientos y propuestas.

Fátima Espinoza analiza las tecnologías de información y comunicación (TIC) en Honduras y concluye que el golpe de Estado del 2009 marcó un giro en el uso de estas. Los medios sociales y los medios masivos alternativos vieron un auge debido no solo a la existencia de nuevas plataformas, sino también a la severa polarización social. En su artículo sobre El Salvador, Roberto Pérez concluye que la radio y la televisión hegemónicas en El Salvador reproducen las relaciones de clase en los territorios. Mientras tanto, los medios de comunicación comunitarios emergen en zonas de menor actividad económica.

Jully Cupples y Kevin Glynn estudian las respuestas mediáticas a la crisis actual en la Costa Caribe de Nicaragua y los retrocesos en las luchas regionales por la autonomía y los derechos a la tierra. El artículo analiza cómo organizaciones de derechos humanos están utilizando espacios como YouTube para responder a esta situación.

En el caso de Costa Rica, Lorenzo Ramírez Cardoza analiza los balances financieros del Grupo Nación en el contexto de la crisis del modelo de negocio de la prensa escrita. Con el auge de las plataformas digitales, disminuye la inversión publicitaria en las ediciones impresas y con ello decrece la principal fuente de ingresos.

En su conjunto, el dossier confirma la importancia de los medios de comunicación, tradicionales y nuevos, en la construcción de la democracia en Centroamérica, al tiempo que enfatiza la importancia de la democratización misma de las instituciones mediáticas.

Junto con los artículos del dossier, este volumen 44-2018 reúne 10 artículos. Los cuatro primeros artículos de esta sección son análisis históricos. Diana Senior Angulo analiza las poblaciones afrodescendientes de la región en términos censales, legales e identitario-nacionales. La autora sostiene que posterior a la abolición de la esclavitud los estigmas sobre la población negra no desaparecen; estos más bien se incrementan con el arribo de la migración afrocaribeña en toda la región, a partir de la segunda mitad del siglo XIX.

También en perspectiva histórica, el artículo de Daniel Matthew Mendiola examina las relaciones entre la Costa Rica colonial y el Reino Mosquito, una confederación afroindígena que surgió en la costa caribeña de Centroamérica durante el siglo XVII. El artículo presta especial atención al papel de Francisco Corella, quien fue el principal negociador del año 1711 hasta al menos 1724.

Víctor Hugo Acuña Ortega analiza la formación del Estado en Nicaragua y Costa Rica en los siglos XIX y XX, desde una perspectiva comparativa. La tesis principal es que, en la larga duración, la formación del Estado en Costa Rica ha sido un proceso acumulativo; mientras que en Nicaragua dicho proceso ha estado interrumpido por diversos conflictos. Sin duda, este artículo permite analizar en perspectiva histórica la crisis política que ha vivido la sociedad nicaragüense en este año 2018.

El artículo de Amanda Úrsula Torres Freyermuth explora el conflicto electoral que aconteció en Chiapas a partir de la promulgación del Plan de Jalapa, una iniciativa en contra de las logias masónicas. En el caso de Chiapas conllevó no solo a la destitución del Congreso, sino también a la anulación de la elección para gobernador de Joaquín Miguel Gutiérrez.

Daniel Villafuerte analiza la producción de palma aceitera en la región del Petén de Guatemala y la región del río Bajo Aguán en Honduras, dos casos emblemáticos que generaron complicados conflictos agrarios y socioambientales, los cuales han costado muchas vidas humanas.

En el caso de El Salvador, María del Carmen García Aguilar e Iván Francisco Porraz analizan las representaciones que construyen las instituciones y la sociedad sobre las personas jóvenes, a su vez, también toman en cuenta aquellos discursos que estas definen para sí mismos y para los otros.

María Mercedes Salgado procura responder cómo se generó y se desarrolló el activismo del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) de Nicaragua. Para ello, se reconstruyen las oportunidades políticas para su surgimiento y las razones de la elección de repertorios de acción política.

María Augusta Rodrigues Ribeiro analiza experiencias de parto recogidas a través de un cuestionario aplicado a 24 mujeres en el año 2013. Se trata de un tema particular, en el caso de Nicaragua, en donde las tasas de cesárea oscilaron entre un 26 y un 34 por ciento durante el periodo 2006-2012, en tanto que las tasas esperadas serían entre el 5 y el 15 por ciento.

El artículo de Francisco Hernández Ulloa examina críticamente las relaciones entre consumismo y exclusión social y su afectación a personas jóvenes. Entre los hallazgos destaca la presencia de una heterogeneidad de juventudes en el territorio con dificultades de inserción laboral, agravada en el caso de las mujeres.

Juan Pablo Bohoslavsky estudia la economía y finanzas de Panamá desde una perspectiva de derechos humanos. Este artículo analiza la irrupción de los llamados “papeles de Panamá”, las disposiciones adoptadas por el gobierno, así como las medidas adicionales que aún resultan necesarias.

En la sección Documentos, Jorge Rovira Mas analiza la recepción pública que, en el marco de la autonomía universitaria, tuvo una mesa redonda sobre la filosofía marxista, organizada por la Cátedra de Filosofía en la Escuela de Estudios Generales de la Universidad de Costa Rica en el año 1967. Como parte de este artículo, se transcribe la mesa redonda, como documento para la posteridad.

Este volumen cierra con 11 reseñas, de las cuales 7 corresponden a libros no editados en Costa Rica, con lo cual contribuimos en la difusión de la producción editorial regional.

Para terminar, debo comunicar que, luego de 8 años, me corresponde trasladar la dirección del Anuario al Dr. Dennis Arias Mora, profesor de la Escuela de Historia de la Universidad de Costa Rica, a quien aprecio y agradezco muchísimo su disposición para asumir esta tarea.

El Anuario se ha consolidado con números robustos que en promedio suman de 15 artículos y una docena de reseñas. En los últimos 5 años introdujimos dossiers que nos permitieron invitar a autores y autoras a colaborar con trabajos en torno a temáticas específicas. Entre enero y octubre 2018, nuestro sitio web superó las 33 000 visitas, ello sin contar con las visitas desde otros repositorios. En resumen, el Anuario es una publicación de referencia sobre Centroamérica.

Todo ello no hubiese sido posible sin el trabajo de las personas autoras y dictaminadoras, de los consejos editoriales y de quienes se han despeñado como editoras y asistentes. El trabajo de diagramación e impresión ha estado a cargo de la Editorial de la Universidad de Costa Rica, en donde siempre hallamos la mayor colaboración. A lo largo de estos ocho años Erick Salas Acuña, Gabriela Fonseca Argüello y Ariana Alpízar Lobo se han desempeñado como editores. Una semana sí y otra también fuimos conformando y editando artículos y reseñas. A todos y todas un enorme muchas gracias.

Es mi esperanza que el trabajo que realizamos desde el Anuario colabore, aunque sea en una minúscula medida, a la comprensión de la realidad centroamericana. Si se pudiera soñar, es también mi esperanza que nuestro trabajo contribuya en la construcción de sociedades justas; algo que se escribe fácil pero que se ha probado enormemente difícil de conseguir.

Creative Commons License Este es un artículo publicado en acceso abierto bajo una licencia Creative Commons