Introducción
La primera etapa en el desarrollo de la caries es el depósito, también denominado placa, una película de productos precipitados de saliva y alimentos en los dientes, esta placa está habitada por un gran número de bacterias disponibles fácilmente para provocar la caries dental.1 Es importante el impacto de las hormonas sexuales femeninas durante el embarazo a escala oral, pues su expresión se relaciona con las patologías como la enfermedad periodontal y gingivitis.2
El microorganismo asociado con la caries dental es el Estreptococo Mutans,3 esta bacteria depende en gran parte de los hidratos de carbono o azúcares para su alimento.4 A partir de este sustrato, las bacterias producen ácidos, en particular el láctico y enzimas proteolíticas.5 Los ácidos son la causa principal de la caries,6 porque las sales de calcio de los dientes se disuelven lentamente en un medio ácido, y una vez que se han absorbido, la matriz orgánica restante es digerida rápidamente por las enzimas proteolíticas.7
Cada vez que se ingiere azúcar, los ácidos atacan el esmalte dentario por un tiempo aproximado de 20 minutos,8 por lo que el ataque ácido es proporcional al tiempo que haya presencia de azúcar, lo que explica que es la frecuencia y no la cantidad de azúcar ingerida lo que provoca la caries dental.9
La Academia Americana de Periodoncia ha publicado una revisión de diversas enfermedades sistémicas para las cuales las periodontales podrían ser un potencial factor de riesgo; dentro de estas se incluyen, prematuridad, bajo de peso al nacer, bacteremias, endocarditis infecciosa, entre otras.2
En relación con la mujer embarazada, los cambios más frecuentes y marcados radican sobre el tejido gingival,10 y dan lugar a la llamada gingivitis del embarazo, padecimiento que se caracteriza por una encía aumentada de tamaño, de color rojo y que sangra con facilidad; 11 también al granuloma del embarazo, que es otra alteración del tejido gingival ante la presencia de irritantes locales. 12
Durante el primer mes de embarazo la mujer no experimenta mayor alteración a escala bucal,13 a partir del segundo mes comienzan los síntomas y signos inflamatorios, que se mantienen o aumentan durante el segundo trimestre,14 llegan al máximo de los signos y síntomas al octavo mes de gestación, y disminuyen durante el último mes, hasta su completa remisión después del parto.15,17
Como todo proceso de salud/enfermedad, lo biológico no puede aislarse de lo social. Esta etapa también puede provocar cambios en los modos y estilos de vida, aunque de ninguna manera puede hacerse extensivo a todas las embarazadas.16 Los cambios en los hábitos alimentarios son evidentes, 18 la dieta cariogénica en alta frecuencia comienza a cobrar un papel principal en relación con los restantes alimentos, lo que constituye el sustrato para la bacteria.19
Unido con esto, se presenta la deficiencia del cepillado por las náuseas20, la embarazada se ve asediada por la sintomatología propia de este estado, lo cual contribuye a la acumulación de placa dentobacteriana con bacterias organizadas y adheridas a ella sobre la superficie del diente.21
Por otra parte, se ha demostrado que el sistema inmunológico maternal presenta algunas modificaciones particulares para evitar el rechazo inmunológico entre la madre y el feto.1 La literatura refiere que la progesterona funciona como un inmunosupresor en los tejidos gingivales de mujeres embarazadas previniendo el tipo agudo, rápido de reacción inflamatoria contra la placa,1 pero permitiendo un tipo crónico creciente de reacción del tejido, que da lugar clínicamente a un aspecto exagerado de la inflamación. Sin embargo, se ha evidenciado que muchas veces, a pesar del control de la placa y demás factores de riesgo, está implícita la inflamación gingival, que da como respuesta que existe una disminución de las células T, lo cual sugiere que esta depresión sea un factor en la sensibilidad alterada de los tejidos gingivales. 4,5,6
Sabemos bien que en el periodo de gestación se deben tener cuidados especiales, tanto para la madre como para el bebe, con estos antecedentes este estudio pretendió mediante una encuesta, determinar los hábitos de higiene oral, alimentarios y los perjudiciales para la salud en mujeres gestantes y comprender la necesidad de la intervención odontológica en las embarazadas, como prevención y tratamiento a los hábitos perjudiciales.
Materiales y métodos
Se realizó un estudio analítico observacional de corte transversal en los meses de abril y mayo de 2016. Se respetó la identidad de las personas, los factores de riesgo y la libre participación en la investigación. Previamente se solicitó firmar la carta de consentimiento informado.
El universo estuvo conformado por 125 mujeres que asisten al centro de salud ubicado en el barrio “6 de Julio”, del norte de la ciudad de Quito. El tamaño de la muestra fue obtenido tomando en cuenta las personas que acudieron en los meses de abril y mayo de 2016 al centro de salud mencionado, por lo cual se obtuvo 45 embarazadas que asistieron al centro médico del barrio “6 de Julio” del norte de la ciudad de Quito- Ecuador a realizarse algún chequeo médico, indistintamente de si era un control pre-natal.
Para la recolección de datos se utilizó un instrumento tipo encuesta compuesta por preguntas de selección múltiple con única respuesta tomada del artículo original “Hábitos de higiene oral, alimentarios y perjudiciales para la salud en mujeres embarazadas”, y que permitió obtener información sobre los datos personales de las pacientes, período y número de embarazos, hábitos alimentarios, perjudiciales para la salud bucal y también los de higiene bucal.
Foto Puesto de salud
Resultados
Se incluyeron en el estudio un total de 45 embarazadas. Entre estas el 72,7% se encontraban en su primer embarazo y el 27,2% ya tenían historia de otro u otros embarazos. En cuanto al período de gestación, el 36,3% se ae hallaban en el primer trimestre, el 27,2% en el segundo trimestre y el 36,3%, en el tercer trimestre.
En cuanto al hábito de ingerir dulces y alimentos ricos en carbohidratos, el 100% afirmó consumirlos . De estas el 45,5% acostumbra hacerlo dos veces al día y el 54,5%, que corresponde a la mayoría, consume estos alimentos una vez al día.
En cuanto al consumo de cigarrillos, el 9,09% fuma menos de 5 cigarrillos por día, el 36,3% eran ex - fumadoras y el 54,5% no fuman. En relación con el consumo de alcohol, el 18,1% ingiere alcohol 1 - 3 veces por semana, mientras que el 81,8% no lo toma. Con respecto a otros hábitos considerados como perjudiciales para la salud oral, el 72,7% de las gestantes toma café y el 36,3% se muerde las uñas. De acuerdo con los datos recolectados, el 100% refirió algún mal hábito.
Discusión
Se presentaron limitaciones al no realizar un seguimiento completo de las pacientes y la anamnesis y revisión clínica de ellas, pero se obtuvieron resultados importantes como determinar la costumbre de la mayoría de las embarazadas de consumir azúcares y dulces al menos una vez al día, pero el consumo de alimentos fermentables es un factor importante para la susceptibilidad a la caries dental, ya que poseen un fuerte potencial acidogénico.22 A pesar de esto, la aparición de caries siempre ha sido asociada con los hábitos de higiene oral por medio de dentífricos a base de flúor.23 Sin embargo, las embarazadas sometidas a la encuesta revelaron información variada de acuerdo con sus hábitos de higiene como es la frecuencia y duración del cepillado lo que si se asocia al consumo de dulces, podría reflejar cierto riesgo de caries en ellas.
En la etapa del embarazo debido a las necesidades energéticas y calóricas de la mujer se recomienda una dieta amplia24 y con breves intervalos de entre 2 y 3 horas entre cada comida 25 lo que podría resultar en un descuido en la higiene oral. De este modo se explicaría el por qué las embarazadas que respondieron la encuesta, se cepillaban los dientes y usaban hilo dental con la frecuencia mínima recomendada.
Es necesario tomar en cuenta la situación económica de las gestantes que acuden a los subcentros de salud, debido a que esta repercute en su estado de salud oral y en general, más cuando de embarazadas se trata, aun sabiendo lo fácil que resulta realizar prevención con chequeos regulares, profilaxis y educación para evitar hábitos que perjudican la salud.
Las mujeres en estado en gestación son más susceptibles a adquirir hábitos perjudiciales; sin embargo, no a todas las mujeres afecta las enfermedades antes descritas, porque es la falta de información sobre cuidados y prevención lo que perjudica mayormente a las gestantes y los bebés desde la etapa prenatal.
Conclusiones
Mediante la encuesta realizada logramos obtener los hábitos de higiene oral, alimentarios y los perjudiciales para las mujeres gestantes que acudieron al centro de salud del barrio “6 de Julio”, pues el 100% refirió algún mal hábito, dentro de estos la ingesta de café, consumo de cigarrillo y alcohol en bajos porcentajes y morderse las uñas, y con respecto a la higiene oral se presenta con una mínima frecuencia a pesar de la ingesta frecuente de carbohidratos.
Autores:
Samanta Arriaga1,
Jorge Gudiño1,
Santiago Oñate2,
Alejandra Núñez2,
Ana Armas3.
1Estudiantes de Odontología de la Facultad de Ciencias de la Salud “Eugenio Espejo” de la Universidad Tecnológica Equinoccial. Quito- Ecuador.
2 Odontólogos, Universidad Central del Ecuador.
3 Máster, PhD en Operatoria Dental, Profesora de Odontología basada en evidencia de la Universidad Tecnológica Equinoccial. Quito-Ecuador Correspondencia: Alejandra Núñez
Correo electrónico: ale_nu1804@hotmail.es Teléfono: +593 99 574 98 66 ECUADOR