SciELO - Scientific Electronic Library Online

 
vol.7 issue1Síncope: estrategia diagnóstica, utilidad del holter implantableSíncope: Estrategia diagnóstica. Utilidad del Holter Implantable author indexsubject indexarticles search
Home Pagealphabetic serial listing  

Services on Demand

Journal

Article

Indicators

Related links

  • Have no similar articlesSimilars in SciELO

Share


Revista Costarricense de Cardiología

Print version ISSN 1409-4142

Rev. costarric. cardiol vol.7 n.1 San José Jan. 2005

 

Utilización de la Máscara Laringea (ML)
en pacientes pediátricos (PP).

Dr. Miguel Tibaldi

Resumen

Objetivo: presentar la experiencia con el uso de la ML en la anestesia de los PP durante el cateterismo cardíaco.

Método: Se realizó el análisis retrospectivo de 127 cateterismos en 120 pacientes pediátricos. Los datos fueron obtenidos de historias clínicas, fojas quirúrgicas y hojas de sala del servicio de hemodinamia de pacientes pediátricos con cardiopatías congénitas sometidos a cateterismos diagnósticos y terapéuticos.

Resultados: De los 127 cateterismos se recabó la información completa en 88. De éstos, 43(48%)pacientes fueron del sexo femenino y 45(52%)del sexo masculino, El peso osciló entre 2. 7 y 68 kg y las edades entre 12 horas y 14 años. La duración de los procedimientos entre los 45 min y 2, 45 horas. Los estudios correspondieron 66 a estudios diagnósticos, 9 valvuloplastias, 4 septostomías, 1 pericardiocentesis, 4 angioplastias (2 coartaciones aórticas 2 a ramas pulmonares), 2 cierre de fístula con coil y cierre de DAP 2 con coil.

Se utilizó Sevofluorano a dosis altas (8%)en la inducción, la ML se colocó en plano anestésico, y posteriormente se disminuyó la concentración para mantenimiento en un plano no profundo, manteniendo la ventilación espontánea y se la retiró en el mismo plano.

Uno (1. 1%)de los pacientes presentó espasmo laringeo severo que requirió de intubación endotraqueal como complicación, el resto de los pacientes salieron de la sala de hemodinamia vigiles, con ventilación espontánea y buena dinámica respiratoria.

Conclusión: La utilización de la ML en la anestesia de PP es un método seguro, de fácil instrumentación, con menor invasión de la vía aérea, que permite una segura utilización de gases anestésicos y adecuado control oximétrico con baja incidencia de complicaciones.

Palabras Claves: Máscara laringea, edad pediátrica, Cateterismos cardíacos.

Abstract

Objective: to present our experience with the use of laryngeal mask (LM)during anesthesia for cardiac catherization in pediatric patients (PP).

Methods: One hundred and 20 patients underwent a total of 127 cardiac catherization procedures. Their cases were analyzed retrospectively.

The information was obtained from medical records, operative notes and cath lab reports from PP who underwent diagnostic and therapeutic procedures.

Results: Only 88 procedures out of the 127 had complete information. There were 43 females (48%)and 45 males (52%). The patients' weight ranged between 2. 7 to 68 kgs and their ages between 12 hours to 14 years old. The procedures lasted from 45 minutes to 2. 45 hours. Sixty-six procedures were diagnostic, 9 were valvuloplasties, 4 septostomies, 1 pericardiocentesis, 4 angioplasties (2 of aortic coarctation and 2 of pulmonary artery branches), 2 coil closures of a leak and 2 ductus coil closures.

Sevoflourane at high concentrations (8%)was used for induction. The LM was inserted when the patient reached anesthetic level and then this gas was cut back to keep the patient in a lighter plane, maintaining spontaneous ventilation and then it was discontinued all together.

One patient (1.1%)presented severe laryngeal spasm that required endotraqueal intubation, the rest of the patients came out of the cath lab alert and with spontaneous ventilation and normal respiratory parameters.

Conclusions: The utilization of LM for PP anesthesia is a safe method, is easy and it involves less airway invasion and it permits utilization of gases and adequate oxymetric control with low complication index.

Keywords: laryngeal mask, pediatric age.

 

Introducción

Debido a las características anatómicas y fisiológicas especiales de los PP, el dificultoso manejo de la vía aérea en estos, se ha convertido en un gran desafío para los anestesistas, pediatras y pediatras emergenciólogos.

La ML se diseñó en 1981 como parte de la búsqueda específica de una vía aérea que fuera más práctica que la mascarilla facial y menos penetrante y surgió originalmente con una finalidad general para su uso en la anestesia. Como dispositivo supraglótico, por lo general su colocación y posición final no se ven impedidas por los aspectos anatómicos y patológicos que acompañan a menudo a las vías respiratorias difíciles por lo que se ha extendido su utilización en los pacientes pediátricos.

La máscara laringea cubre un espacio entre la mascarilla facial (MF)y la cánula traqueal (CT), tanto con respecto a la posición anatómica como al grado de penetración. Uno de los aspectos sobresalientes consiste en que brinda una vía aérea rápida y libre en la gran mayoría de los pacientes 1, 2. Se utiliza para aliviar o evitar hipoxia, y hay un gran número de reportes de casos y algunos estudios pequeños en los que se indica su uso fructífero como técnica planeada y de urgencia en las vías respiratorias difíciles, tanto en adultos como en niños, y bajo anestesia general y local 1. En este artículo se presenta la experiencia en el Instituto Modelo de Cardiología de Córdoba (IMC), con el uso de la ML en la anestesia de los PP durante el cateterismo cardíaco.

Material y Método

Se realizó el análisis retrospectivo de 127 cateterismos en 120 PP desde enero de 1998 hasta febrero de 2004. Fueron incluídos todos los pacientes con cardiopatías congénitas sometidos a cateterismos cardíacos, tanto diagnósticos como terapéuticos (en algunos de ellos con más de un procedimiento), menores de 14 años y en quienes se utilizó la ML como método de ventilación durante la anestesia. Fueron excluidos aquellos pacientes pediátricos que por otros motivos ingresaron en la sala de hemodinamia en Asistencia Respiratoria Mecánica (ARM)mediante cánula traqueal, y se la mantuvo durante el procedimiento. Todos los procedimientos se realizaron en la sala de hemodinamia bajo estrictas condiciones de asepsia y monitoreo permanente del ritmo cardíaco y oxicapnografía. Los datos fueron obtenidos de historias clínicas, hojas de anestesia y hojas de sala del Servicio de Hemodinamia de pacientes del Servicio de Cardiología Pediátrica del IMC y de pacientes derivados de otras instituciones públicas y privadas para tales fines.

La elección del tamaño de la ML se realizó de acuerdo al peso del paciente, según las tablas estandarizadas 3, 4. (Ver Tabla 1) Las variables analizadas fueron, edad, sexo, duración del procedimiento, tipo del procedimiento diagnóstico. El punto final primario fue la presentación de complicaciones relacionadas con la anestesia y la colocación de la ML, tanto en la inducción, como en el mantenimiento y la recuperación, a fin de valorar la seguridad y eficacia del dispositivo.



Resultados (Tabla 3 y Gráfico 2)

De los 127 cateterismos se recabó la información completa en 88. De éstos, 43(48%)pacientes fueron del sexo femenino y 45(52%)del sexo masculino (Gráfico 1). El peso de los pacientes osciló entre 2,7 y 68 kg y las edades entre 12 horas y 14 años con un promedio de 2.3 años. La duración de los procedimientos osciló entre los 45 min y 2, 45 horas.



Los procedimientos correspondieron:

• 66 a estudios diagnósticos,
• 9 valvuloplastias,
• 4 septostomías,
• 1 pericardiocentesis,
• 4 angioplastias (2 coartaciones aórticas, 2 a ramas pulmonares),
• 2 cierre de fistula con coil y cierre de DAP 2 con coil.

Se utilizó Sevofluorano a dosis altas al 8% en la inducción, la ML se colocó en plano anestésico y posteriormente se disminuyó la concentración para mantenimiento en un plano no profundo al 2-3% , manteniendo la ventilación espontánea y se la retiró en el mismo plano.

Uno (1.1%)de los pacientes presentó espasmo laríngeo severo que requirió de intubación endotraqueal como complicación, el resto de los pacientes salieron de la sala de hemodinamia vigiles, con ventilación espontánea y buena dinámica respiratoria.

Discusión

El primer informe independiente sobre el uso de la ML en niños fue el publicado por Smith en 1988, quien utilizó con buenos resultados prototipos para la artritis crónica juvenil. En 1989, Beveridge publicó su uso en un caso no intubable de Síndrome de Pierre-Robin que requería de intervención quirúrgica por paladar hendido. Desde entonces se ha utilizado para gran variedad de problemas pediátricos de las vías respiratorias.

Las ML pediátricas son versiones a escala del modelo del adulto y por lo tanto, no cabría esperar diferencias con su uso en niños. La incidencia de colocación imperfecta es más alta en niños que en adultos, pero son semejantes la incidencia y facilidad de la inserción con buenos resultados 1.

Desde entonces varios estudios 9 se han puesto en marcha comparando la utilización de este dispositivo en diferentes tipos de procedimientos invasivos, desde reanimación cardiopulmonar hasta procedimientos quirúrgicos mayores, e incluso comparando los resultados con diferentes elementos anestésicos (halotano 19; propofol vs. Sevofluorano; Ketamina y lidocaína vs. Propofol, 23 etc.), y metodologías (ventilación espontánea vs. Presión positiva 20).

Lopez Gil y Brimacombe en 1996 en un estudio prospectivo realizado en niños que requirieron la anestesia dada por residentes de 3° año, y sin experiencia previa en la colocación de la ML, analizaron la presentación de problemas mayores y menores durante cada una de las fases de la anestesia. Ellos concluyeron en que esta técnica sufrió una rápida evolución en su instrumentación, con una disminución en la incideancia de problemas del 62 al 2% desde los inicios hasta la actualidad, registrados en 75 diferentes tipos de procedimientos y que entre los anestesiólogos pediátricos, un índice mayor del 10% de problemas determinaría un uso subóptimo del dispositivo, es decir, que con el perfeccionamiento de la técnica de inserción se han reducido significativamente las complicaciones presentadas en las primeras épocas. Entre otras conclusiones, cabe mencionar, que los mencionados autores no hallaron diferencias significativas entre los grupos con ventilación intermitente y la ventilación con presión positiva ni entre los grupos que utilizaron propofol vs. Isofluorano 21.

Frediani y col. en un estudio prospectivo de 300 pacientes sometidos a intervenciones quirúrgicas refirieron una incidencia de 1.7% de laringespasmo, 4.3% de hipoxia, 1% de obstrucción; 2.3% de tos; 5% de traumatismo y 0.3% de vómitos, sin hallar una conexión entre el tamaño de la ML y las compliciones 26.

Otros autores 20 analizaron el trabajo respiratorio durante la ventilación espontánea en niños anestesiados comparando la ML con la máscara facial y el tubo endotraqueal y concluyeron en que la ML reduciría la presión de trabajo respiratoria con respecto a la máscara facial, probablemente debido a mejor exposición de la vía aérea superior contra el colapso provocado por la presión inspiratoria negativa, permitiendo incluso la adición de bajos niveles de CPAP.

También se ha difundido ampliamente el uso de la ML para la ventilación y anestesia de PP sometidos a procedimientos con fibroendoscopio óptico, diagnósticos y terapéuticos, demostrando ser segura y efectiva, con baja incidencia de laringoespasmo e hipoxia, ya que su mayor diámetro interno, comparado con la cánula traqueal permite el uso del fibroendoscopio sin un incremento significativo de la resistencia en la vía aérea 24.

Conclusión

La máscara laringea es un dispositivo utilizado en anestesia para mantener la vía aérea permeable de un modo menos invasivo que la cánula traqueal, la cual surgió inicialmente con indicaciones limitadas a la intubación de vías aéreas difíciles como auxiliar de la primera, pero que ha demostrado ser segura, de fácil instrumentación, que permite una adecuada utilización de gases anestésicos y control oximétrico con baja incidencia de complicaciones. En esta serie, no se han presentado evidencias clínicas de broncoaspiración, en contraste a lo reportado por la literatura internacional y el tiempo y calidad de recuperación de la anestesia han sido óptimos, se lograron resultados satisfactorios, en procedimientos de duración y complejidad variable con mínima incidencia de complicaciones.

Máscara Laringea: Utilización en pacientes pediátricos.

Concepto y Diseño.

La Máscara Laringea (ML) se diseñó originalmente en 1981 como parte de la búsqueda específica de una vía aérea que fuera más práctica que la MF (máscara facial) y menos penetrante que la cánula traqueal (CT). Después de una investigación prolongada y de una fase de desarrollo (7. 500 pacientes y 60 prototipos) 5 , se lanzó al mercado la ML en el Reino Unido en 1988, y dentro de los 12 meses siguientes fue usada en más de 500 hospitales. La ML en 1993 ya era usada en más del 50% de las anestesias generales administradas en algunos centros del Reino Unido y su uso se extendió a muchas otras aplicaciones en el marco quirúrgico, sobretodo cirugías ambulatorias, y procedimientos de corta duración en los cuales la intubación es innecesaria 2-6-7-8.

El diseño final consiste en una cánula de caucho de silicona abierta en un extremo en la luz de una pequeña mascarilla elíptica que tiene reborde exterior insuflable. El extremo glótico de la sonda se encuentra protegido por dos barras de caucho verticales, llamadas barras de apertura de la mascarilla (MAB), para impedir que la epiglotis entre y obstruya la vía respiratoria. Hay una cánula piloto y un globo piloto autosellable que están conectados con el extremo proximal más amplio de la elipse insuflable. La ML se asienta en la hipofaringe a nivel de la unión de las vías respiratorias, sitio en el que forma un sello de presión baja descansando contra el esfínter esofágico superior por detrás de la base de la lengua y la epiglotis apuntando hacia arriba. (Figura 1)

La ML está disponible en 6 tamaños (Tabla 1), desde el neonatal hasta el de los adultos grandes (Figura 2), y en la actualidad se usa en cerca de 20 millones de pacientes en casi 60 países 1.


Se han reportado fórmulas basadas en el peso del paciente a fin de optimizar la elección del tamaño del dispositivo, como la sugerida por Tetsuro Kagawa 17 , en la cual el peso del paciente es dividido por 15 y este resultado exponenciado a 0.5. :

(Peso del pac / 5)(0. 5)=Tamaño de ML

Ejemplo:

para un paciente de 15 Kg. =(15/5)(0.5)=(3)(0.5)=1.7, en este caso la ML adecuada será el tamaño 2.

Debido a las especiales características anatómicas y fisiológicas, la inesperada dificultad de la vía aérea pediátrica, es uno de los mayores desafíos para anestesistas, pediatras y médicos emergenciólogos. Se han identificado factores de riesgo relacionados con problemas en la vía aérea y hay nuevos aspectos controversiales que conciernen al uso de la cánula endotraqueal en los niños, y nuevas aplicaciones para el bien conocido dispositivo de la ML sirviendo como guía para la fibra óptica. Recientes estudios también han demostrado problemas específicos con la ML como posibles ventajas de un nuevo prototipo de ML para niños 9.

Historia

El desarrollo de la ML se remonta a 1981 en el Royal London Hospital, Whitecjapel, donde un anestesiólogo británico, el Dr. Archie Brain, sugirió que la Máscara Dental de Goldman podría ser modificada para ser posicionada alrededor del tracto de entrada de la laringe más que en la nariz 2.

El objetivo de Brain fue desarrollar un dispositivo en la cual se pudiera acceder rápidamente a una vía aérea obstruída y ser simple y atraumática para insertar. Un prototipo fue usado en un paciente en 1981 y fue seguido de un registro de un estudio piloto con 23 pacientes con resultados excitosos 10.

En 1983 se usó con buenos resultados, un prototipo inicial en un varón de 114 kg. de peso, que se iba a someter a una laparotomía y que no se había podido intubar. En 1985 se había utilizado en 5 pacientes en los que se esperaban dificultades en la intubación.

La investigación fibróptica sugirió la posibilidad de usar la ML como intubador de vías respiratorias, y en el período de mayo y junio de 1983 se utilizó la ML prototípico con diámetro interno de 14 mm para intubar a ciegas a tres pacientes con una cánula traqueal de 9 mm.

En abril de 1987, la ML se había colocado en 21 pacientes en los que era difícil la intubación ordinaria, y en octubre de 1987 se utilizó con resultados satisfactorios por primera vez en la intubación pediátrica fallida 5.

En 1989, Chad y col. Hicieron pasar un bujía elástica de caucho por la ML de dos individuos anestesiados y deslizaron sobre ella una CT después de retirar la ML., poco después esta técnica fue refinada, dirigiendo la bujía hacia el interior de la traquea guiada por una fibra óptica.

En 1991 McCrirrick y Pracilo informaron por primera vez la intubación de un paciente despierto a través de la ML, y en ese mismo año se describió también por primera vez la ML de tipo hendido, superando así el problema de la limitación del tamaño de la CT cuando se usaba la ML estándar como intubador de las vías respiratorias.

Inserción 1-2

Preparación de la ML: antes de ser usada en el paciente anestesiado, la ML debe ser cuidadosamente inspeccionada por fugas, con la misma levemente sobreinsuflada, luego debe removerse el aire y debe permanecer completamente desinflada.

Debe haber disponible un tamaño apropiado para cada paciente.

La porción posterior de la ML debe estar cubierta por lubricante; debido a que el mismo puede obstruir el orificio distal o gotear hacia la laringe y provocar laringoespasmo, se debe tener la precaución de evitar el lubricante en la parte anterior del dispositivo

Inducción de la Anestesia: La inserción de la ML requiere de un plano anestésico profundo.

Similar al logrado para la intubación endotraqueal. El agente de inducción óptimo debe producir la relajación de la mandíbula y la atenuación de los reflejos de la vía aérea, permitiendo la inserción en 30-60 seg, de inconciencia.

Técnica de Inserción (Figura 3): La técnica de inserción no requiere de laringoscopio ni de relajantes musculares y se ha diseñado para imitar el mecanismo mediante el cual se deglute el bolo alimenticio. La clásica posición del cuello flexionado y la cabeza en extensión debe ser mantenida durante la inserción de la ML, manteniendo con la mano que no intuba la estabilidad de la cabeza al sostenerla desde el occipucio. La mandíbula debe poder abrirse totalmente. Durante la deglución, la lengua actúa como émbolo semicircular que arrastra y aplana el bolo alimenticio alrededor de la pared curva formada por el paladar y la superficie posterior de la faringe. La inserción de la máscara se logra mediante una acción semejante con el dedo índice sustitutivo de la acción de la lengua. Para obtener una colocación óptima en la hipofaringe con su musculatura circundante, debe insertarse la ML de tamaño apropiado con obnubilación de los reflejos mediante la anestesia general o tópica y el manguito desinsuflado por completo. El uso de anestesia tópica (lidocaína spray al 10%)permite un mejor despertar del paciente.


El problema que se encuentra a menudo, durante la inserción es la dificultad para hacer pasar a la ML hacia abajo por detrás de la lengua, esto suele reflejar una técnica deficiente. El error más frecuente es no poder conservar una fuerza centrífuga constante con el dedo índice contra la curvatura del paladar duro y la parte posterior de la bucofaringe hasta que la ML ha pasado hasta la hipofaringe.

Una vez insertada la ML, se insufla con 10-30 ml de aire y se precede a conectarla al circuito de ventilación mecánica. El oxido nitroso difundido dentro del balón debe ser monitorizado periódicamente, sobretodo en aquellos procedimientos que duran más de una hora.

Técnica de remosión: La ML protege a la laringe de las secreciones faringeas, por lo que la misma debe permanecer inflada hasta que se recuperen los reflejos deglutorios, y debe ser retirada una vez que el paciente se encuentra en un plano de anestesia no profunda, a fin de evitar el espasmo laringeo reflejo.

Técnicas a ciegas: Las tasas de buenos resultados de la instrumentación ciega de la ML varían de 0-93% , lo que depende de la técnica, tiempo disponible, experiencia, número de intentos y equipos elegidos. Las técnicas ciegas tienen las ventajas potenciales de independencia, de disponibilidad del equipo básico y de capacitación especializada. Las desventajas son las de cualquier técnica ciega puesto que puede requerir de demasiado tiempo, la colocación errónea entrañará el peligro de traumatismo, y existe un riesgo de intubación esofágica. No nos explayaremos en estas técnicas ya que exceden los propósitos de la revisión.

Otras técnicas:

Técnicas fibrópticas: Las técnicas guiadas por visión directa tienen una tasa esperada de buenos resultados superior, y la intubación puede lograrse con rapidez, riesgo mínimo de traumatismo y de intubación esofágica. Se ha señalado también el uso de Fibroendoscopio para la inserción de la ML en el paciente despierto y la inducción subsecuente de anestesia en secuencia rápida.

Como guía de la cánula traqueal en una intubación difícil 1-18 La incidencia de intubación traqueal fallida o fracasada varía entre el 1:1000 y 1:2000 en la población quirúrgica no obstétrica y contribuye a la morbilidad y mortalidad anestésica. La ML al ser un dispositivo supraglótico no ve afectada su colocación por la anatomía de las vías aéreas respiratorias. Su alineación anatómica con la glotis y el sello de presión baja permite la ventilación sincrónica del paciente y vuelve a este dispositivo de utilidad como auxiliar de la intubación. Esto deja al operador la elección de utilizar la ML como vía aérea definitiva y/o como auxiliar de la intubación.

Limpieza y esterilización: La esterilización usando formaldehído, glutaraldehído u óxido de etileno está contraindicada. Los fabricantes aseguran una garantía de un mínimo de 10 autoclaves aunque algunos centros han reportado hasta 250 ciclos conservando la funcionalidad.

La ML debe ser lavada con agua, un detergente suave tan pronto como sea posible luego de la extubación. El balón no debe estar completamente desinsuflado antes del autoclave, porque se puede romper; la esterilización de este dispositivo por autoclave no debe superar los 121-123 °C por 3 minutos.

Fisiología y respuesta cardiovascular a la inserción

La ML es una cánula relativamente no penetrante y varios investigadores han concluido que existen mínimos cambios hemodinámicos y respiratorios en respuesta a su inserción, el aparato respiratorio se ve alterado en menor grado porque no penetra las cuerdas vocales. La resistencia al flujo de aire de la ML ordinaria es menor del correspondiente a la cánula traqueal. La reacción de estrés hemodinámico a la inserción de la ML es menos pronunciado que durante la intubación endotraqueal y se requiere menos anestesia para tolerar la ML una vez colocada. La inserción no produce bacteriemia importante cuando se la compara con la intubación nasal. La incidencia de laringoespasmo se reduce de manera global. El período de recuperación acompaña de incidencia menor de desaturación, tos y espasmo laríngeo.

Un estudio examinó las variables cardiovasculares en 100 pacientes comparando la ML con otro método (cánula traqueal), concluyó en que ambos grupos demostraron un aumento transitorio de la presión sistólica y diastólica, aunque el incremento fue más atenuado y más corta duración en el grupo de la ML. Un estudio posterior demostró que la frecuencia cardíaca se incrementó más y por más tiempo en la intubación endotraqueal que en la ML; estos hallazgos indican que el uso de la ML podría ser más ventajoso en aquellos casos en los que una marcada respuesta presora es indeseable, como en pacientes con enfermedades cardiovasculares y cerebrovasculares. 1-2

Recientemente, Bennett y col. en un estudio que incluyó 27 pacientes con enfermedad arterial coronaria compararon la intubación endotraqueal y la ML objetivándose menos cambios hemodinámicas, particularmente en la tensión arterial y la frecuencia cardíaca con la utilización de la ML que en la intubación endotraqueal, con respuestas similares en la extubación. 25

Broncoaspiración

Desde que la ML se ha vuelto comercialmente disponible en 1998, ha sido ampliamente aceptada como un sustituto de la cánula traqueal o la máscara facial. Sin embargo, se han reportado casos de aspiración del contenido gástrico intraoperatorio relacionada a la ML. La incidencia de broncoaspiracón relacionada a la ML es alrededor de los 2.3-2.9 por 10.000. La regurgitación y la aspiración relacionada a la ML son debidas a una localización incorrecta, excesiva presión de insuflación del balón, incorrecto tamaño de la ML e inadecuada profundidad de la anestesia. La posición anatómica ideal de la ML es obtenida en solo un 50-60% de las veces, pero los resultados funcionales persisten excelentes en el 95-99% de todas las inserciones. En los estudios con fibrobroncoscopía óptica, el esófago puede ser claramente visto vía ML en el 10-15% de los casos. Barker y col., reportaron la incidencia de regurgitación en un 25% de los pacientes anestesiados con ML, sin embargo en otras series la incidencia fue mucho más baja (7.8%), teniendo en cuenta las manisfestaciones clínicas; pero ascendió hasta un 33% cuando se realizó la prueba con azul de metileno en el esófago; sin embargo, estas fueron de cantidad muy pequeña y sin traducción clínica significativa 16. Rabey y col., también reportaron que la ML podría disminuir la presión del esfínter esofágico inferior en pacientes durante la anestesia general. Es por estas razones, que la ML está contraindicada en pacientes con estómago lleno, riesgo incrementado de regurgitación, vómitos activos o en quienes presentan sangrado en la vía aérea superior (ver tabla 2).

En conclusión, la limitación primaria de la ML es que no provee una confiable protección de los pulmones de la regurgitación proveniente del estómago, pero estos efectos pueden ser reducidos al grado de la insignificancia si se realiza la colocación correcta de la ML con la punta descansando sobre el esfínter esofágico superior, los lados cubriendo la fosa piriforme y la superficie superior detrás de la base de la lengua, y con una correcta sedación y relajación de la musculatura faringea previa a la inserción de la ML 14-15.

Via aérea difícil

Cuando no de puede establecer una ventilación oxigenación adecuada en un paciente, ello produciría una deuda de oxígeno cuyas consecuencias pueden conducir a un daño cerebral irrecuperable y falla multiorgánica. En anestesia, la incidencia de la imposibilidad combinada de no poder intubar ni ventilar es de 1 en 10 mil 11.

Se considera:

• Vía aérea difícil a la situación en que un anestesiólogo convencionalmente entrenado experimenta dificultad con la ventilación de la máscara facial, dificultad con la intubación traqueal o ambas.

• Intubación difícil es la intubación en las mismas manos que requiere de más de 3 laringoscopías o más de 10 minutos.

• Ventilación difícil cuando el anestesiólogo no es capaz de mantener una saturación mayor del 90% ventilando a presión positiva intermitente con FiO2 de 100% en un paciente cuya saturación era mayor del 90% previo a la intervención anestésica.

• La laringoscopía difícil es cuando no es posible ver las cuerdas vocales con un laringoscopio convencional (Laringoscopía grado III-IV)12.

Grado de dificultad a la laringoscopía. Se visualizan estructuras difíciles (Figura 4).


I Glotis, incluyendo cara anterior y posterior.
II Aspecto posterior de la Glotis. La comisura anterior no se ve.
III Solamente epiglotis. La glotis no puede ser expuesta.
IV Solo se ve el paladar duro (la epiglotis o la glotis no se ven).

Predictores de intubación difícil

Existen valores anatómicos utilizados a fin de predecir la ocurrencia de intubación difícil, que aunque tienen un valor predictivo positivo bajo, deben ser tomados en cuenta, por ejemplo:

• Distancia esternomentoniana: <12, 5 cm.

• Extensión cefálica: <80 cm.

• Mallampati: III o IV

• Distancia Tiromental: <6 cm.

• Incapacidad para avanzar la mandíbula

• Apertura bucal: <4 cm.

La presencia de ciertas patologías como hidrocefalia, craneosinostosis, menigocele, macroglosia, hiper trofia amigdalina generan una dificultad independiente de los mencionados parámetros anatómicos.

En una vía aerea difícil conocida, el uso de la ML es de instalación fácil, incluso en pacientes con grado de dificultad laringoscopía III o IV como fue demostrado en un estudio que incluyó 34 niños con este tipo de laringoscopía, obteniéndose una buena vía aérea en el 73% y adecuada en el 27% 13. La laringoscopía evita la distención gástrica secundaria a infructuosos intentos de ventilación pero lamentablemente puede aumentar el riesgo de aspiración de contenido gástrico ya que puede estimular los músculos hipofaríngeos como lo hace el bolo alimenticio, relajando el esfínter esofágico inferior. El rendimiento de la ML para obtener una saturación adecuada es del 94%.

Debido a las particulares características anatómicas y fisiológicas de los pacientes pediátricos sometidos a cateterismos cardíacos; y teniendo presente que una gran proporción de las cardiopatías congénitas se asocian a malformaciones mencionadas en cabeza y cuello, se considera a este grupo como de "Vía aérea difícil conocida ".

Ventajas y desventajas de la Máscara Laringea

Ventajas

• La técnica para el uso de la ML es fácilmente aprendida y rápidamente perfeccionada por personal médico y paramédico.

• Comparada con el tubo endotraqueal, el dolor de garganta es menos problemático con la ML para el paciente y reduce la injuria en los ojos y los nervios faciales.

• La inserción de la ML es simple y no requiere de relajantes musculares o del uso del laringoscopio, minimizando las mialgias postoperatorias, y el riesgo de trauma en la cavidad oral.

• Puede aparecer tos, espasmo laringeo y estridor, pero no es más común con la ML que usando la vía aérea orofaringea.

• Hay respuesta cardiovascular a la inserción

• La ML es mejor tolerada que la cánula traqueal a menores niveles de anestesia, permitiendo la ventilación espontánea y los pacientes se despiertan antes.

• La inserción y remoción de la ML produce mínimos efectos sobre el esfínter esofágico superior.

• Provee una vía aerea más segura y controlada que la máscara facial en niños y adultos, con menos episodios de hipoxia detectada por oxímetro de pulso.

• Cumple un rol importante en el manejo de la vía aérea difícil y la resucitación de emergencia.

• Es útil en cirugías de cantantes profesionales, en quienes la intubación traqueal acarrea un riesgo de daños de las cuerdas vocales que puedan resultar en cambios de la voz.

• Impone menos resistencia a la respiración comparada con el tubo endotraqueal.

Desventajas

• La aspiración del contenido gástrico sigue siendo el problema más serio durante el uso de este dispositivo, probablemente debido a que reduce la presión del esfínter esofágico inferior.

• La herniación del balón después de sobreinsuflación o autoclaves repetidos puede dificultar su correcta colocación.

• Se ha detectado un 10% de obstrucción parcial de la vía aérea utilizando el fibrobroncoscpio, sin importancia clínicamente significativa.

• Otra causa de obstrucción es el laringoespasmo de inserción, el cual resuelve espontáneamente dentro de los 20 segundos.

• La tos y el espasmo laringeo ocurren tan frecuentemente como con la vía orofaríngea y es usualmente causada por la inserción en presencia de una inadecuada anestesia.

• Se ha descrito el estridor post-extubación, sobretodo en pacientes con enfermedad pulmonar obstructiva crónica y podría estar relacionado a reacciones alérgicas desencadenadas por el uso de la lidocaína como lubricante.

• Puede ocurrir disartria transitoria relacionada a procedimientos prolongados.

• El trauma uvular puede ocurrir en el intento forzado de pasar la ML rodeando la curvatura faríngea posterior. Este problema se evita insertando el dispositivo con el balón totalmente desinsuflado.


Otras situaciones clínicas en las cuales la ML ha sido usada:

• Reanimación neonatal 23.

• Cirugía de Cabeza y cuello.

• Obstetricia.

• Pacientes quemados.

• Cantantes profesionales.

• Procedimientos diagnósticos: Cateterismos Cardíacos, Mapeo Electroencefalográfico, Resonancia Nuclear Magnética.

• Cirugía láser facial.

• Procedimientos odontológicos.


Contraindicaciones para el uso de la ML:

• Incapacidad para extender el cuello o abrir la boca a >1.5 cm haciendo el avance de la ML dificultoso (p. ej: espondilitis anquilosante severa, inestabilidad de la columna cervical).

• Patologías faríngeas (p. Ej: abscesos, hematomas, disrupción de los tejidos).

• Obstrucción de la vía aérea sobre o debajo de la laringe.

• Baja compliance pulmonar o alta resistencia de la vía aérea (p. ej: obesidad mórbida, broncoespasmo, edema pulmonar o fibrosis, trauma torácico).

• Relajación inadecuada de los músculos faríngeos en la anestesia profunda.

• Riesgo incrementado de regurgitación (ver tabla 2).

• Ventilación de un solo pulmón.

 

Bibliografía

1. Brimacombe, J. R, MBCh, FRCA, Berry, A. MBChB, FRCA "Cánula de mascarilla laríngea " CLINICAS DE ANESTESIOLOGIA DE NORTEAMÉRICA. Interamericana. 1995.         [ Links ]

2. Pennant, J. M. A., M. B., F. R. C. Anaes W. White, Ph. D., MD. "The laryngeal Mask Airway, Its uses in Anesthesiology " Anesthesiology , V79. N° 1. Jul. 1993.         [ Links ]

3. Brimacombe JR, Berry AM, Campbell RC "Selection of proper size of lanryngeal mask airway in adults ". Anesth Analg 1996; 83: 664        [ Links ]

4. Tesuro Kagawa; Hidelfumi Obara, M. D. "An easy fórmula to remember the Lageal Mask Airway Size-Patient Weght Relationship.        [ Links ]

5. Brain AIJ : "The development of the laryngeal mask-a brief history of the invention, early clinical studies and experimental work from which the laryngeal mask envolved ". Eur J. Anesthesiol 4: 5-17, 1991        [ Links ]

6. Coryne BJ: "The use of the laryngeal mask in day case and short stay surgery ". Ir. J Med Sci 159: 185-186. 1990        [ Links ]

7. Hugues JA. Gataure PS: "Pattern of use of the larybgeal mask airway " (letter) Anesthesia 47: 354. 1992        [ Links ]

8. Brain AIJ: "Déja vu (letter). Br. Br. Anesth 6-4: 4006. 1990        [ Links ]

9. Branbrink AM, Meyer RR: "Management of pediatric airway-anatomy, physiology and developments in clinical practice". Anesthesiol Reanim. 2003; 28(6): 144-51        [ Links ]

10. Brain AIJ: "The laryngeal mask: A new concept in airway manegement ". Br. J. Anaesth 55: 801-804, 1983í        [ Links ]

11. Benumof J, Séller M. "The importance of transtracheal jet ventilation in manegement of the difficult airway ". Aesthesiology 1989, 71: 769        [ Links ]

12. Baeza, F. ; Leyton, P. Grove, E "Vía aerea difícil. Manejo y rendimiento de Aparatos " Boletín de Anestesiología de Chile. Rev. De la Sociedad de Anestesiología de Chile. Edición Setiembre de 2000        [ Links ]

13. Walker RW; "The laryngeal mask airway in the difficult paediatric airwa: a assessment of posiyioning and use in fibreoptic intubation. Paediatric Anaesth 2000: 10(1): 53-58        [ Links ]

14. Yuan-Shion Huan; Jeng-Tieng Shen et al. "Pulmonary Aspiration Associated with Laryngeal Mask Airway General Anesthesia ". J. Med. Sci 2004; 24(3): 153-156        [ Links ]

15. C. Keller; J. Brimacombe; et al. "Aspiration and the laryngeal mask airway: three cases and a review of the literature        [ Links ]

16. Blitt CD, Gutman HL ; Cohen DD "Silent regurgitation and aspiration durin the general anesthesia. Anest. Analg 49: 707-712. 1979        [ Links ]

17. Tetsuro Kagawa, MD; Hidefumi Obara, MD "An easy formula to remember the Laryngeal Mask Airway Size-Patient Weight Relationship ". Anesthesiology 2000 February 92(2): 631-632        [ Links ]

18. Takashi Asai, MD "Tracheal Intubation through the laryngeal Mask Airway "; Anestesiology 1996 August: 85: 439        [ Links ]

19. Jean Reignier, MD; Mondler ben ameur, et al "Spontaneus ventilation whith halotane in children: a comparative Study betwen Endotracheal Tube and Laryngeal Mask Airway " Anesthesiology 1995; 83: 674-678        [ Links ]

20. Keidan, I; Gavin F. Et al. "Work of Breathing During Spontaneus Ventilation in Anesthetized Children: a comparative Study Among the Face Mask, Laryngeal Mask Airway, and Endotracheal Tube.         [ Links ]

21. Lopez gil, M; Brimacombe, J; et al. "Laryngeal Mask Airway in pediatric practice: a prospective study of Skill Acquisition by Anesthesia Residents        [ Links ]

22. Zanardo V., Simbi AK, Savio V et al. "Neonatal ressiscitation by laryngeal mask airway after elective cesarean section. Fetal Diagn Ther. 2004 May-Jun; 19(3): 228-31        [ Links ]

23. Ahyon-Bahk; J. ; Sung, J. "A comparison of ketamine and lidocaines Spray with propofol for the insertiion of Laryngeal Mask Airway in Children: A double-Blinded Randomized Trial " Anesth Analg 2002; 95: 1586        [ Links ]

24. Yazbeck-Karam, VG; Aouad, MT. "Laryngeal mask airway for ventilation during diagnostic and interventional fibreoptic bronchoscopy in children ". Paediatr Anaesth 2003 Oct., 13(8): 691-4        [ Links ]

25. Bennett, SR; Grace, D, Griffin SC. "Cardiovascular changes with the laryngeal mask airway in cardiac anaesthesia. " Br.. J. Anaesth. 2004 Jun; 92(6): 885-7. Epub 2004 Apr. 19        [ Links ]

26. Frediani, M; Blanchini G. ; y col. "The laryngeal mask in pediatric anestesia " Minerva Anestesiol. 1996. Mar; 62(3): 65-71        [ Links ]

Servicio de Cardiología Pediátrica, Instituto Modelo de Cardiología, FUCCADIM, Universidad Católica de Córdoba, Argentina.
Correspondencia: Avda. Sagrada Familia 359-5003 -Córdoba -Argentina.
e-mail: fliatibaldi@arnet.com

Creative Commons License All the contents of this journal, except where otherwise noted, is licensed under a Creative Commons Attribution License