Introducción
Las personas que realizan labores relacionadas con el cumplimiento de la ley y lucha contra el crimen saben que forman parte de un grupo con alto riesgo laboral al igual que los rescatistas, paramédicos, bomberos y otros equipos de respuesta en emergencias quienes están expuestos a ambientes peligrosos y accidentes durante sus labores.(1)
Los mayores índices de lesiones fatales de acuerdo con estudios de salud ocupacional, corresponden a los agentes de la ley y el orden (policías e investigadores) junto con el personal de bomberos(1). La proporción de lesiones fatales sufridas en agentes de la ley y el orden durante el cumplimiento del deber en los Estados Unidos de Norteamérica es de 4:1 aproximadamente (14,2 por cada 100,000) si se compara con el promedio de trabajadores (3,3/100,000),(2) en otros estudios se estima que la proporción puede ser incluso de 5:1 ya que se presentan 19,8 por cada 100,000 personas.(3)
En un período de estudio de 11 años la principal causa de muerte durante el cumplimiento del deber de los policías e investigadores fue homicidios con 47% y en segundo lugar accidentes de tránsito 36%,(3) esto genera altas posibilidades de que los cuerpos sufran alteraciones y condiciones que generan dificultad para realizar una identificación por reconocimiento facial o dactiloscopia debido a la destrucción de los cuerpos, como ocurre con los cadáveres de bomberos que mueren durante sus labores(4).
El fallecimiento de personal de alto riesgo puede ocurrir durante las labores diarias o bien durante desastres que pueden ser naturales o generados por el hombre, entre ellos ataques terroristas como el ocurrido en el World Trade Center (WTC) el 11 de septiembre de 2001, que provocó la muerte de 2.749 personas, de las cuales aproximadamente 421 eran policías y miembros de cuerpos de rescate (5-7) .
En Costa Rica el número de bomberos fallecidos durante los últimos treinta años es muy bajo, cinco personas (tres bomberos, dos voluntarios durante la atención de una inundación el 4 de noviembre de 1994 en San Rafael de la Unión y el último bombero fallecido en marzo del 2013.(8)
Con respecto al personal del Organismo de Investigación Judicial que ha fallecido durante su labor desde su creación hasta el inicio de esta investigación se contabilizan 21 personas, 18 hombres y 3 mujeres, dentro de la clasificación de sus puestos se encuentran investigadores(as), peritos judiciales, notificadores y agentes de protección (información suministrada por la Dirección General).
Una adecuada recolección de datos odontológicos antemortem permite realizar una identificación fehaciente en cuestión de horas, mientras que la información dental antemortem errónea puede generar confusiones, retrasos y finalmente hacer necesaria la utilización de métodos más complejos por falta de cuidado o negligencia del personal odontológico.(9)
En la literatura no existe evidencia de que se cuente con algún formato antemortem diseñado específicamente con fines de identificación a nivel mundial en cuerpos policiales ni en personal de rescate, el único estudio donde se ha valorado la percepción de la utilidad de los registros dentales en personal de alto riesgo laboral fue realizado en el personal de Bomberos de Costa Rica.(8)
Materiales y métodos
Se presentó ante la Jefatura del Departamento de Medicina Legal del Organismo de Investigación Judicial de Costa Rica un resumen del proyecto de investigación que contenía el objetivo general, objetivos específicos, así como la justificación y los beneficios para el Organismo de Investigación Judicial; además se adjuntó al documento el cuestionario piloto revisado por una persona experta en estadística.
Luego de obtener la autorización para iniciar la investigación, se aplicó el cuestionario piloto a 10 personas investigadoras quienes realizaron observaciones y comentarios; con base en estas fue corregido y calibrado nuevamente para ser enviado al personal.
El cuestionario final fue diseñado en la plataforma Google Forms y enviado vía correo institucional a la totalidad de personas investigadoras compuesta por 1200 individuos distribuidos en: Departamento de Investigaciones Criminales, Oficina de Planes y Operaciones, Delegaciones Regionales, Subdelegaciones Regionales, Oficinas Regionales, Unidades Regionales y Secretaría General.
El cuestionario incluyó un encabezado con una descripción breve del proyecto junto con una cláusula de consentimiento y anonimidad, así como la posibilidad de completar únicamente los datos generales; el mismo estuvo en línea del 21 de junio al 20 de julio de 2021.
Los resultados fueron analizados mediante las distribuciones de frecuencia, cruce de variables, comparación de medias con base en el análisis de variancia. El nivel mínimo de confianza para las comparaciones fue del 95%. La revisión bibliográfica utilizada en la presente investigación se realizó por medio de diferentes plataformas virtuales como Medline, Scielo y PubMed.
Resultados
El cuestionario fue realizado por 807 personas, de las cuales 784 contestaron el cuestionario completo (97% de la muestra), el 3% restante únicamente completó los datos sociodemográficos, el mismo fue aplicado del 21 de junio al 20 de julio de 2021 mediante correo electrónico institucional.
Sexo y edad
Con respecto al sexo el 79% fueron hombres y un 21% mujeres, lo que representa una proporción de 4:1. La edad promedio de los entrevistados fue de 37,8 años (IC95%: 37,3 - 38,48) sin que se encontrara diferencia estadísticamente significativa (p=0,419) en la edad promedio de hombres con respecto a la de las mujeres, sin embargo se puede observar que las mujeres (ver Tabla 1) presentan una concentración mayor en las grupos de edad más jóvenes mientras que los hombres se distribuyen más uniformemente entre todas las edades.
Estado civil
Con respecto al estado civil se observa que el 58% indicaron estar casados o conviviendo en unión libre; en este aspecto se presenta una diferencia estadísticamente significativa según sexo (p=0,001); debido a que las mujeres presentan una mayor proporción como solteras con respecto a los hombres; mientras que los hombres en el estado conyugal casado o unión libre con respecto a las mujeres (ver tabla 2).
Distribución por provincias
El 80% de las personas investigadoras laboran en la Región Central del país considerando las provincias de San José (51,2%), Heredia (11.3%), Alajuela (9,7%) y Cartago (8,3%). Mientras que el 20% provienen de las provincias de Puntarenas (8,3%), Limón (6,7%) y Guanacaste (4,6%) como se observa en la figura 1.
Distribución administrativa de personas investigadoras
De acuerdo con los datos obtenidos la mayor parte de personas investigadoras se encuentra destacada en el Departamento de Investigaciones Criminales (39,9%), en segundo lugar, a nivel de Delegaciones Regionales (23%) y en tercer lugar en la Oficina de Planes y Operac iones (15,9%). Ver figura 2.
Tratamientos odontológicos y periodicidad
El 88% de los entrevistados indican no tener placas, tornillos o prótesis metálicas en su cuerpo y el 98% indica no tener algún dispositivo médico que tenga número único de identificación en su cuerpo. El 37% de los entrevistados indican que en algún momento les han preguntado si tienen tatuajes o cicatrices en su cuerpo que sean útiles para identificación.
El 53,4% de los entrevistados indica que asistieron a consulta odontológica hace un año o menos; sin que se encontrara diferencia estadísticamente significativa por sexo (p=0,565) ni por grupo de edad (p=0,244), además un 1,9% refiere nunca haber asistido (figura 3).
El 69% indica que en algún momento les han tomado una radiografía panorámica de la boca completa encontrándose diferencia estadísticamente significativa por sexo (p=0,001) ya que las mujeres presentaron una mayor proporción con respecto a los hombres. Por grupo de edad no se presentó diferencia estadísticamente significativa (p=0,508).
El 89% indica tener tratamientos dentales como coronas, puentes o implantes; sin que resultar ser estadísticamente significativo por grupo de edad (p=0,408) ni por sexo (p=0,484).
Percepción del riesgo
Con respecto a la percepción de riesgo de la labor que realizan, el 86% percibe que es alto o muy alto sin que se presente diferencia estadísticamente significativa por sexo (p=0,496) aunque si por grupo de edad (p=0,005), ya que entre mayor es la edad menor es la percepción de alto riesgo, un 49,1% refiere haber estado en situaciones que pusieron su vida en peligro.
Métodos de identificación de personas
El método de identificación más conocido por las personas investigadoras es el de ADN (99,6%) seguido de la dactiloscopía (98,7%) y la odontología (95,5%); asimismo fue la combinación de métodos con mayor prevalencia (figura 4).
Percepción de utilidad de métodos de identificación en personas investigadoras
Con respecto a las menciones de los métodos de identificación más adecuados para profesiones de alto riesgo como investigación, el principal fue el del ADN seguido por la dactiloscopia y la odontología. Ver figura 5.
Opinión sobre la elaboración de registros dentales con fines de identificación
Al preguntar si consideraban útil la creación de registros odontológicos antermortem para la identificación de personas que laboran en el OIJ el 88% indicó que era de gran utilidad sin que se encontrara diferencia estadísticamente significativa por sexo (p=0,603 ) ni por grupos de edad (p=0,919). Figura 6.
Discusión
Es muy importante resaltar que de la totalidad de la población de personas investigadoras (1200) el cuestionario fue realizado por 807 personas, lo que representa aproximadamente dos terceras partes del total, este tamaño de muestra permite tener un panorama real de la opinión y de las características de dicha población.
La cantidad de mujeres investigadoras corresponde a un 21%, este un porcentaje es incluso mayor que en los Estados Unidos de Norteamérica donde corresponde a un 12% aproximadamente,(10) llama la atención que además las mujeres presentan una mayor concentración en los grupos de edad más jóvenes y presentan una mayor proporción como solteras con respecto a los hombres.
La distribución por provincias de las personas investigadoras muestra que la mayor parte se encuentra concentrada en el Gran Área Metropolitana (GAM), especialmente en San José donde se concentra más de la mitad de los encuestados (51.2%), estos datos son similares a los obtenidos en investigaciones realizadas en otras profesiones de alto riesgo en Costa Rica como bomberos.(11)
De acuerdo con los datos del Crime Data Explorer del Federal Bureau of Investigation de los Estados Unidos de Norteamérica durante el año 2020 fueron lesionados 576 oficiales y uno asesinado, este número incluye investigadores del FBI, del Departamento de Defensa entre otros.(12) Por otra parte vale la pena mencionar que en ese país también se llevan estadísticas de todos los oficiales caídos en el cumplimiento del deber desde 1786 y se estima en poco más de 22,000 oficiales.(10)
Dentro de los datos de mayor relevancia obtenidos se encuentra que 53.4% visitó al odontólogo hace un año o menos; y el 69% dice haberse realizado una radiografía panorámica (de la boca completa) que resulta sumamente útil en identificación de seres humanos. (13)(14) En este punto si existe una diferencia estadísticamente significativa por sexo (p=0,001) ya que las mujeres presentaron una mayor proporción con respecto a los hombres y esto es común debido a que en múltiples estudios se ha demostrado que las mujeres asisten a tratamientos odontológicos con mayor frecuencia que los hombres.(15-18)
Otro punto que vale la pena resaltar es la percepción del riesgo, donde existe conciencia y es valorado como alto o muy alto por la mayoría (86%) pero dicha percepción disminuye conforme aumenta la edad (p=0,005).
La utilidad de los tratamientos dentales como método de identificación cuando existe una adecuada información antemortem es simplemente enorme, debido a que se podría identificar a una persona incluso por medio de un solo diente si la información es de buena calidad, sin importar que se encuentre carbonizado (19-25) y por el contrario un registro inadecuado puede retrasar e incluso impedir una adecuada identificación.
Los registros de tejidos blandos con fines de identificación son en realidad de poca utilidad porque sus características son poco estables en el tiempo (27-32), por eso se prefiere utilizar el odontograma, los registros de tratamientos efectuados y las imágenes dentales debido a que son documentados y archivados por la mayoría de profesionales,(33)(34) además una imagen radiológica puede ser interpretada por cualquier profesional en odontología sin importar el lugar donde se encuentre.
Conclusiones
Esta investigación demuestra que las personas investigadoras del Organismo de Investigación Judicial consideran que los registros odontológicos son útiles como medio de identificación, además una gran mayoría asiste a consulta odontológica con regularidad y cuenta con registros clínicos que incluyen radiografías panorámicas.
La gran participación en el cuestionario demuestra que existe interés por parte del personal en contar con medios que faciliten su identificación en caso de fallecimiento, en especial en momentos donde el crimen organizado ha incrementado los niveles de delincuencia durante los últimos años.
Llama la atención que no existen protocolos en la literatura donde se obtenga información antemortem del personal que se encuentra expuesto a riesgo laboral alto, ni en Costa Rica ni a nivel mundial por lo que implementar un formato con fines de identificación es una necesidad imperante.
La identificación por métodos odontológicos es confiable, rápida y económica por lo que se recomienda se implemente como protocolo en el Organismo de Investigación Judicial el formato de identificación, como plan piloto en las personas investigadoras y de ser posible a todo su personal en un mediano plazo.