Ettore de Girolamí.

South Miami Hospital, University of Miami School of Medicine; Miami, Fla.

En noviembre de 1950, pocos meses después de llegar a Costa Rica, conocí al Dr. Alfonso Trejos, en esa época director del laboratorio clínico del Hospital San Juan de Dios. El Dr. Trejos puso a mi disposición un micros. copio cerca de su oficina y con él tuve oportunidad de discutir muchos problemas de diagnóstico y más tarde, de intercambiar ideas científicas y de planear programas para mejorar lo que en ese tiempo era la Facultad de Ciencias.

En julio de 1951, el Dr. Carlos Manuel Gutiérrez Cañas me ofreció un puesto en la Lucha contra el Cáncer, trabajo que tuve por muchos años gracias a la ayuda contínua, moral y económica, de ese colega.

En la segunda mitad de 1951, el Lic. Marcelino Coto, profesor de histología de normal de la Facultad de Ciencias, tuvo que ausentar. se del país y me ofreció en forma interina esta cátedra, la que ocupé en propiedad al renunciar más tarde a la misma el Lic. Coto.

Durante el primer año tuve que dictar el curso en conjunto a los estudiantes de II y N año de 10 que luego sería la Facultad de Microbiología. Con estos grupos de estudiantes aprendí el castellano; aprendí a querer al pueblo de Costa Rica y también a conocer las necesidades de los universitarios. Por aquella época, mi trabajo universitario se desarrollaba en forma paralela al hospitalario.

Después de un año en Costa Rica, ya mi español era más aceptable y mi contacto en la Clínica de Tumores con pacientes costarricenses y con mis estudiantes me había dado la oportunidad de conocer, en mi campo, cuáles eran las necesidades más importantes. Fue así como en los primeros días de setiembre de 1952, durante una de mis visitas al laboratorio del Hospital San Juan de Dios, expuse al Dr. Trejos mi plan para fundar una revista científica patrocinada por la Universidad. Don Alfonso acogió la idea con entusiasmo, y juntos nos pasamos la mañana soñando y haciendo planes.

En ese tiempo, había sido recién nombrado Rector de la Universidad el Lic. Rodrigo Facio, un dinámico catedrático con quien don Alfonso y yo teníamos buenas relaciones. El nuevo Rector se había propuesto tres importantes objetivos: la fundación de la Ciudad Universitaria; la formación de profesores de tiempo completo y la fundación de la Facultad de Medicina. Nos preguntamos entonces si la creación de una publicación científica sería en ese momento lo suficientemente importante para la vida de aquella Universidad en formación; creimos que sí, y nos propusimos lograr que el Rector y el Consejo Universitario aceptaran nuestro plan. En el contexto de las aspiraciones y planes universitarios, Costa Rica debía demostrar en el campo internacional que su Universidad no era sólo una casa de estudios, sino que en la misma se podía crear conocimientos. La publicación entonces de una revista, daría la oportunidad de conocer en el país y en el extranjero cual era la producción científica de la Institución; además, por este medio se podría promover el intercambio con otras revistas internacionales y por consiguiente el enriquecimiento de la Biblioteca Universitaria, en ese entonces, muy reducida en el campo de las ciencias.

En octubre de 1952, en una reunión informal con don Rodrigo Facio le comuniqué mi idea acerca de la revista: su aceptación fue muy entusiasta y me aconsejó como hacer los trámites para que la misma fuera aprobada por el Consejo Universitario. Regresé optimista al Hospital a comunicar lo ocurrido a don Alfonso y al hacer planes más concretos; nos enfrentamos entonces a un nuevo problema: yo era italiano y don Alfonso había regresado recientemente de hacer sus estudios en Brasil: se necesitaba un "purista" del idioma castellano!!!. El Lic. Armando Ruiz, colaborador de don Alfonso en el laboratorio del hospital tenía conocimientos científicos, era un excelente latinista y conocía muy bien el español; no había duda de que era la persona más idónea para colaborar con nosotros. (Fig. 1).

En diciembre del mismo año redactamos el documento de propuesta de creación de la revista y el Consejo Universitario conoció y aprobó el proyecto en la sesión del 5 de enero de 1953 (Apéndice 1). En aquel mismo mes de enero, nos reunimos muchas veces para discutir una serie de detalles: cuál sería el nombre de la revista; cuál sería su tamaño; cuántos números anuales podíamos publicar; qué papel era el más adecuado; cuál sería la forma y el color de la carátula; cuántos ejemplares tendría cada edición; todas estas interrogantes nos parecían muy difíciles de resolver, pero lo hicimos.

Las dos primeras decisiones importantes fueron que, los trabajos fueran principalmente de autores costarricenses; así la mayoría del material a publicar sería regional, de manera que la palabra "tropical" tendría que formar parte del nombre de la revista. En ese entonces la Universidad no tenía Facultad de Medicina y el Colegio de Médicos ya tenía una publicación, de modo que optamos por descartar la palabra "medicina" que iría a restringir mucho los temas de las publicaciones. En ese momento, la Universidad tenía solamente las Facultades de Farmacia, Odontología, Ciencias y Agronomía, de modo que sólo la palabra "biología" podría abarcar todas estas ciencias. Para seleccionar el primer nombre, consultamos una lista de publicaciones ya conocidas: Acta, Anales, Boletín, Publicaciones, Gaceta, Prensa, Revista, etc. Los nombres Boletín, Gaceta, Prensa y Publicaciones fueron descartados por diversos motivos y se propusieron los siguientes nombres:

Acta de Biología Tropical: aceptable

Anales de Biología Tropical: menos aceptable

Revista de Biología Tropical: más aceptable

El día 9 de febrero de 1953 nos reunimos con los decanos de las Facultades de Agronomía, Farmacia, Odontología y Ciencias y negamos a una decisión: la publicación se llamaría REVISTA DE BIOLOGIA TROPICAL; este acuerdo unánime fue comunicado al Rector de la Universidad don Rodrigo Facio el 17 de febrero del mismo año (Apéndice 2). El Consejo Universitario, después de dar su aprobación a nuestro acuerdo, decidió que el precio sería de diez colones.

De aquí en adelante, todo procedió como se había planeado, con una sola excepción: la Editora Universitaria no estaba en condiciones de iniciar la publicación, de modo que el señor Rector y el Tesorero Sr. Abel Méndez me autorizaron a escoger una empresa privada. La empresa FALCO nos ofreció las mejores condiciones de costo, papel y además tenían un linotipista con conocimientos de terminología científica, lo cual era muy conveniente. Nos quedaba aún por resolver varias cosas: cómo ordenar las citas bibliográficas; redactar la información para los autores; difundir localmente la noticia de la fundación de la revista; organizar un canje con publicaciones extranjeras para enriquecer la sección científica de la Biblioteca Universitaria. Después de revisar varias publicaciones reconocidas por su buena calidad, decidimos que las referencias bibliográficas se ordenarían así: apellido e inicial del nombre del autor, año, título del trabajo, nombre de la revista (abreviación reconocida), volumen y número de la primera y última página. En el caso de libros debería especificarse el nombre de la casa editora, lugar y número de edición. En el caso de la información a los autores, escogimos un formato "internacional" y nos pareció correcto aceptar trabajos en varios idiomas, con un resumen en español. El Comité de Redacción preparó una carta (Apéndice 3) publicada por la Universidad y divulgada a principios de julio de 1953, poco antes de la aparición del primer número. También se decidió que la carátula fuera de color gris y después de que la Imprenta Falcó nos preparó varios modelos, escogimos uno de ellos (Fig, 4) "Alea iacta est". El 15 de julio de 1953 salió de la prensa el primer número de la Revista de Biología Tropical.

En el Editorial (Apéndice 4), muy conciso, tratamos de expresar nuestro amor y dedicación a la ciencia, a nuestra juventud universitaria y nuestro agradecimiento a los que nos ayudaron a realizar esta tarea.

En noviembre de 1954 la Biblioteca Universitaria editó la primera lista de publicaciones extranjeras recibidas en canje por la Revista. Años después, cuando se discutieron los planes para la fundación de la Facultad de Medicina, las varias autoridades extranjeras que llegaron a asesorar a la Universidad, siempre dieron énfasis a la existencia de la Revista de Biología Tropical y a su importancia como medio para obtener en canje muchas publicaciones internacionales, indispensables para establecer una Unidad Académica que debía nutrirse constantemente de los últimos conocimientos. Pienso que la revista ha sido un estío mulo para las jóvenes mentes científicas de Costa Rica, que encontraron un lugar donde expresar sus ideas. Fue así como varios de nuestros jóvenes estudiantes, ahora reconocidos científicos como Pedro Morera, Leonardo Mata, Fernando Montera, German Sáenz, Rodriga Zeledón, Cecilia Lizano y Róger Bolaños, para mencionar unos pocos, iniciaron sus carreras científicas publicando sus trabajos en la Revista de Biología Tropical.

No puedo terminar este resumen histórico sin mencionar una figura eminente en la continuación y éxito de la Revista, un coloso de la ciencia costarricense: el Dr. Rafael Lucas Rodríguez Caballero (Fig. 1); hoy en día, después de muchos años, de haber viajado mucho y de haber conocido muchos científicos de fama, aún me asombro de los conocimientos multidisciplinarios de ese gran humanista que fue Rafael Lucas, que expresaba su humilde grandeza firnando con una "R"; a él dedico este breve artículo.

San José, enero 7 de 1953

Señor Dr.
Ettore de Girolami
Escuela de Ciencias Presente.

Estimado señor:

Me es grato comunicarle que en sesión del cinco de enero del Consejo Universitario se acordó aprobar la publicación de una revista de carácter científico cuyo nombre y contenido debe usted discutir con el Comité Asesor integrado por los señores Decanos de las Facultades de Agronomía, Ciencias, Farmacia y Odontología.

Atentamente,

U. Gámez Solano
Secretario General

San José, 17 de febrero de 1953

Señor Profesor
Rodrigo Facio
Rector de la Universidad de Costa Rica
Pte.

Muy estimado Señor Rector:

Los profesores Gonzalo González, Fabio Baudrit, Hernán Bolaños, Marcelino Coto, Alfonso Trejos, Armando Ruiz y Ettore De Girolami, nos hemos reunido en la Facultad de Odontología el día 9 del mes en curso para discutir el proyecto de la revista científica, llegando a los siguientes acuerdos:

1) El nombre de la revista será el de "Revista de Biología Tropical".
2) Por el presente año la revista constará de 2 números.
3) La carátula de la revista será de color gris y la escritura irá en azul oscuro.
4) El papel que se usará es del tipo bond, excepto para las páginas que llevan fotografías, en cuyo caso se usará papel satinado.
5) La revista tendrá un tamaño de 25 x 17 cm.
6) El número de páginas será variable.
7) La edición constará de 2.000 (dos mil ejemplares).
8) El modelo es igual al ejemplar adjunto.
9) Posiblemente la Editora Universitaria con el nuevo aparato "Multilith" será la encargada de la impresión.
10) El precio de suscripción lo decidirá el Consejo Universitario.
11) El Tesorero será el Sr. Abel Méndez.
De usted, muy atentamente,

Dr. Ettore De GiroIami

C/ Prof. Gonzalo González
Prof. Fabio Baudrit
Prof. Hernán Bolaños
Prof. Marcelino Coto
Prof. Alfonso Trejos
Prof. Armando Ruiz Archivo
odep.

San José, Costa Rica
Julio, 1953

Estimado señor:

Nos es grato poner en su conocimiento que la Universidad editará una revista científica "REVISTA DE BIOLOGIA TROPICAL". El comité de redacción verá con agrado la colaboración que usted pudiera dispensarle, enviando trabajos inéditos y originales.

Los autores recibirán cincuenta separatas de su trabajo si están suscritos a la revista, en caso contrario se les entregarán únicamente diez.

La revista aparecerá, dadas las circunstancias actuales, dos veces al año. La edición constará de dos mil ejemplares, de los cuales se destinará una buena parte del canje con revistas extranjeras de la misma índole. La suscrip. ción anual será de ¢10.00 (diez colones).

Esperamos contar con su aporte científico y económico, lo que redundará en beneficio de las Ciencias Biológicas en nuestro país.

Muy atentamente,

Comité de Redacción

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(cortar aquí)

Comité de Redacción
Revista de "BIOLOGIA TROPICAL"
Universidad de Costa Rica
San José, Costa Rica

Sírvase incluir mi nombre en la lista de suscriptores a la Revista de Biología Tropical.

Incluyo la suma de ¢10.00 (diez colones) correspondientes a los dos primeros fascículos del primer volumen, 1953

(Nombre y apellidos)
(Dirección completa)

En nuestra joven Universidad se hacía necesaria una revista científica en la cual pudieran ser publicados los trabajos que poco a poco iban apareciendo y que, o permanecían inéditos o veían la luz en revistas extranjeras; con la consiguiente escasa divulgación en nuestro medio.

Pensamos así en dedicar una parte de nuestro tiempo a la preparación de una revista que, dentro de nuestros limitados recursos materiales y escasa producción científica, tuviera la mejor presentación posible y llegara, en el futuro, a merecer consideración en los grandes centros científicos.

Siendo nuestro País, rico en material de estudio para investigaciones sobre la Biología de las regiones tropicales, es éste el campo en el cual nuestro aporte a la Ciencia Universal puede te. ner alguna significación; los trabajos que requieren equipos costosos y material humano de que no disponemos están, por lo tanto, fuera de nuestro alcance.

La "REVISTA DE BIOLOGIA TROPICAL" que, por nuestras condiciones actuales, editará un volumen anual compuesto de dos fascículos, será publicada gracias al interés y la comprensión con que el señor Rector y el Consejo Universitario acogieron y apoyaron desde el principio nuestra idea, asesorándonos con un Consejo Científico el cual nos ha ayudado a resolver buena parte de nuestros problemas.

La recompensa de nuestro modesto trabajo será el estímulo que, para la producción científica de nuestra juventud universitaria, represente el tener una revista seria, de amplia divulgación en el extranjero y que sea expresión del naciente pensamiento científico costarricense.

Comité de Redacción

Apéndices 1 a 4: Transcripción de documentos importantes en el origen de la Revista de Biología Tropical (basada en la colección personal de E. de Girolami).